sábado, 26 de septiembre de 2015

Como Ministrar Bautismo con el Espíritu - Parte 2

Tercer Paso
La Imposición de Manos es un Método Bíblico para Recibir el Bautismo con el Espíritu Santo

La imposición de manos es un método bíblico para recibir el Bautismo con el Espíritu Santo, aunque no es el único.

La imposición de manos es un punto de contacto en el cual cuando las manos son puestas sobre el creyente, este desata su fe para recibir el Bautismo con el Espíritu Santo

Una cosa que debemos notar es que todas las cosas de Dios las recibimos por fe, el Bautismo con el Espíritu Santo también se recibe por fe.

Si ya le hemos compartido lo que la Biblia dice acerca del tema, en Romanos 10:17 dice que la fe ha llegado a su corazón.

Entonces podemos utilizar el método que consideremos más apropiado.

Analicemos los casos en la Biblia para ver los métodos que se usaron:

El primer caso es en Pentecostés donde las 120 personas que estaban en el aposento alto orando y esperando recibieron el Bautismo con el Espíritu Santo.

Hechos 1:4-5 (Castillian)
4 En cierto momento, mientras comía juntamente con ellos, les mandó que no se alejaran de Jerusalén, sino que esperasen el cumplimiento de la promesa del Padre de enviar al Espíritu Santo, tal como Jesús mismo les había anunciado que tenía que suceder. Se lo recordó diciéndoles:
5 Juan os bautizó con agua, pero dentro de pocos días seréis bautizados con el Espíritu Santo. 

Jesús les dijo que no se fuesen de Jerusalén sino que esperasen por el Espíritu Santo que iba a llegar para bautizarlos.

Hechos 1:12-15 (Castillian)
12 Los discípulos se volvieron entonces desde el monte de los Olivos a Jerusalén, que distaba como cosa de un kilómetro.
13 Al llegar, entraron en la casa y subieron al aposento donde se alojaban. Eran Pedro, Juan, Jacobo, Andrés, Felipe, Tomás, Bartolomé, Mateo, Jacobo, hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas, hijo de Jacobo.
14 Todos ellos, unidos por un mismo sentir, perseveraban en la oración juntamente con algunas mujeres, con María la madre de Jesús y con los hermanos de él.
15 Por aquellos días, estando presentes unas ciento veinte personas…. 

Eran unas 120 personas las que estaban esperando en el Aposento Alto; que incluían a los apóstoles, María, la madre de Jesús, los hermanos de Jesús, algunas mujeres y otras personas; los cuales estaban unidos y perseveraban en oración.

Hechos 2:1-4 (BL95)
1 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar.
2 De repente vino del cielo un ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban,
3 y aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y fueron posándose sobre cada uno de ellos.
4 Todos quedaron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les concedía que se expresaran. 

De pronto ellos sintieron una violenta ráfaga de fuego que lleno toda la casa donde estaban y fuero llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en lenguas.

En esta ocasión ellos recibieron el Bautismo con el Espíritu Santo de manera espontánea.

El segundo caso fue en Samaria.

Hechos 8:4-6,12 (NBLH)
4 Así que los que habían sido esparcidos iban predicando (anunciando las buenas nuevas de) la palabra. 
5 Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo (el Mesías). 
6 Y las multitudes unánimes prestaban atención a lo que Felipe decía, al oír y ver las señales (los milagros) que hacía.
12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba las buenas nuevas (el evangelio) del reino de Dios y el nombre de Cristo Jesús, se bautizaban, tanto hombres como mujeres. 

La ciudad de Samaría se encontraba en avivamiento debido a la predicación del evangelista Felipe; grandes conversiones y milagros está sucediendo.

La gente esta recibiendo la primera obra del Espíritu Santo y como resultado de eso están bautizándose.

Hechos 8:14-17 (NBLH)
14 Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan, 
15 quienes descendieron y oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo. 
16 Porque todavía no había descendido el Espíritu Santo sobre ninguno de ellos; sólo habían sido bautizados en el nombre del Señor Jesús. 
17 Entonces Pedro y Juan les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo. 

Los apóstoles enviaron a Pedro y Juan para ver que sucedía y se encontraron con que algo les faltaba a los samaritanos, no habían recibido el bautismo con el Espíritu Santo, así que Pedro y Juan les imponían las manos y ellos eran bautizados.

Hechos 8:18-20 (NBLH)
18 Cuando Simón vio que el Espíritu se daba por la imposición de las manos de los apóstoles, les ofreció dinero, 
19 y les dijo: "Denme también a mí esta autoridad, de manera que todo aquél sobre quien ponga mis manos reciba el Espíritu Santo." 
20 Entonces Pedro le contestó: "Que tu plata perezca contigo, porque pensaste que podías obtener el don de Dios con dinero. 

De este pasaje podemos ver que Pedro y Juan tenían una unción especial para ministrar el Bautismo con el Espíritu Santo, por ese motivo todas las personas a las que les imponían las manos recibían el Espíritu Santo.

De ahí podemos ver que el método por que recibieron los samaritanos el Bautismo con el Espíritu Santo fue por imposición de manos.

Nuestro tercer caso es el apóstol Pablo.

Hechos 9:10-18 (NBLH)
10 Había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananías, a quien el Señor dijo en visión: Ananías. Y él respondió: Heme aquí, Señor.
11 Y el Señor le dijo: Levántate, y ve a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de Judas a uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora,
12 y ha visto en visión a un varón llamado Ananías, que entra y le pone las manos encima para que recobre la vista.
13 Entonces Ananías respondió: Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén;
14 y aun aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu nombre.
15 El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel;
16 porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre.
17 Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo.
18 Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose, fue bautizado. 

En este caso vemos como un simple creyente, Ananías le impuso las manos a Pablo para que reciba el Bautismo con el Espíritu Santo.

Este caso es muy importante ya que nos muestra como un simple creyente puede ministrar el Bautismo con el Espíritu a otro sin necesidad de tener la unción para impartir el Bautismo con el Espíritu.

Por eso, si no tienes la unción para impartir igualmente puedes ayudar a otros a que reciban el Espíritu Santo.

Nuestro cuarto caso es la gente que estaba en la casa de Cornelio.

Hechos 10:30-33 (NBLH)
30 Entonces Cornelio dijo: hace cuatro días que a esta hora yo estaba en ayunas; y a la hora novena, mientras oraba en mi casa, vi que se puso delante de mí un varón con vestido resplandeciente,
31 y dijo: Cornelio, tu oración ha sido oída, y tus limosnas han sido recordadas delante de Dios.
32 Envía, pues, a Jope, y haz venir a Simón el que tiene por sobrenombre Pedro, el cual mora en casa de Simón, un curtidor, junto al mar; y cuando llegue, él te hablará.
33 Así que luego envié por ti; y tú has hecho bien en venir. Ahora, pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oír todo lo que Dios te ha mandado.

Cornelio, que aún no había nacido de nuevo, pero evidentemente era una persona que buscaba a Dios; recibió una visión de Dios en la que le decía 

Hechos 11:13-14 (NBLH)
13 Quien nos contó cómo había visto en su casa un ángel, que se puso en pie y le dijo: Envía hombres a Jope, y haz venir a Simón, el que tiene por sobrenombre Pedro;
14 él te hablará palabras por las cuales serás salvo tú, y toda tu casa.

Como Pedro relata más adelante en el Concilio de Jerusalén, Pedro debía ir para predicarles el evangelio para que ellos reciban la primera obra del Espíritu Santo en el creyente, la salvación.

Así que Pedro fue y empezó a predicarles, y mientras lo hacía pasó algo que los dejo a todos asombrados:

Hechos 10:44-46 (NBLH)
44 Mientras aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el discurso.
45 Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del Espíritu Santo.
46 Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios. 

En ese momento el Espíritu Santo fue derramado por primera vez sobre los gentiles, para los judíos fue algo tan sorprendente que se quedaron atónitos.

Veamos el significado de esta palabra atónitos en la concordancia Strong’s en español:

ξίστημι exístemi; sacar (quedar fuera) de casillas, i.e. aturdir, o (refl.) quedar atónito, atontado, loco: asombrar, atónito, engañar, espantar, loco, maravillarse.

Lo que les sacó de sus casillas, los dejo espantados, maravillados, asombrados y atónitos es el hecho de que los gentiles también pudieran ser salvos; ¿y como se dieron cuenta de esto? Porque los vieron recibir el Bautismo con el Espíritu Santo tal como ellos lo habían recibido en Pentecostés.

Cornelio y los que estaban en su casa recibieron el Bautismo del Espíritu Santo de manera espontánea, sin que nadie los ministre, solo recibiendo la Palabra.

Nuestro quinto caso son los doce discípulos de Juan el Bautista.

Hechos 19:1-7 (NBLH) 
1 Mientras Apolos estaba en Corinto, Pablo, después de haber recorrido las regiones superiores, llegó a Efeso y encontró a algunos discípulos, 
2 y les preguntó: "¿Recibieron el Espíritu Santo cuando creyeron?" Ellos le respondieron: "No, ni siquiera hemos oído si hay un Espíritu Santo." 
3 Entonces Pablo les preguntó: "¿En qué bautismo, pues, fueron bautizados?" "En el bautismo de Juan," contestaron ellos.
4 Y Pablo les dijo: "Juan bautizó con el bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyeran en Aquél que vendría después de él, es decir, en Jesús." 
5 Al oír esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. 
6 Cuando Pablo les impuso las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo, y hablaban en lenguas y profetizaban. 
7 Eran en total unos doce hombres. 

En nuestro último caso en el libro de Hechos vemos como Pablo se dio cuenta que no habían recibido el Espíritu Santo; ni siquiera sabían que existía un Espíritu Santo.

Cuando les predica acerca de Jesús ellos fueron “bautizados en el nombre del Señor Jesús”; es decir, ellos recibieron la primera obra del Espíritu Santo en el creyente, nacieron de nuevo.

Luego les impuso las manos y ellos recibieron el Bautismo con el Espíritu Santo.

Notemos que no dice nada acerca que Pablo tuviera una unción especial para ministrar el Bautismo con el Espíritu Santo, muy posiblemente la tenía pero aquí no dice nada.

Lo que nos muestra este pasaje es que luego de explicar lo que es el Bautismo con el Espíritu Santo cualquier ministro o creyente puede imponer las manos para ayudar a que otros lo reciban.

Lo que hemos visto es que en dos casos el Espíritu Santo fue impartido de manera espontánea (en Pentecostés y en la casa de Cornelio); en dos por imposición de manos (con Pablo y en Efeso) y una vez por la unción de impartir el Espíritu Santo por medio de la imposición de manos (en Samaria).

En cuanto a las formas que se recibe el Bautismo con el Espíritu Santo todas son por fe; por eso es importante que la persona tenga un claro entendimiento de lo que es el Bautismo con el Espíritu Santo; ya que la fe vendrá por el oír la Palabra de Dios que nos habla del tema (Romanos 10:17).

En mi caso, cuando ministro el Bautismo con el Espíritu Santo, le comparto a las personas lo que es y que lo reciban por fe mientras oro en masa para que sea impartido sobre ellos, y ellos por fe lo reciben. 

En otras ocasiones les impongo las manos para ayudarlos a desatar su fe.

El asunto es usar el método adecuado para hacer que la persona reciba más fácilmente el Bautismo con el Espíritu Santo.



jueves, 24 de septiembre de 2015

Como Ministrar a Otros El Bautismo con el Espíritu Santo - Parte 1

Como Ministrar a Otros

El Bautismo con el Espíritu Santo 



Hemos estado viendo lo que es el Bautismo con el Espíritu Santo y su evidencia inicial que es el hablar en otras lenguas.

Como todas las cosas de Dios el bautismo con el Espíritu Santo se recibe por medio de la fe. Y ¿cómo llegamos a tener fe? Por el oír y el oír la Palabra de Dios (Romanos 10:17). 

La pregunta el ¿Cómo podemos ministrar a un hermano para que reciba el bautismo con el Espíritu Santo?


Primer Paso
Debemos Enseñarle Que la Biblia Dice Que Dios Ya Ha Derramado El Espíritu Santo.

Debemos enseñarles que no deben suplicarle a Dios, Él ya derramó el Espíritu Santo y la promesa es para ellos.

Hechos 8:14-16 (RV60)
14 Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan;
15 los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo;
16 porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús.

En Samaria no lloraron y suplicaron a Dios; sencillamente oraron para que recibiesen el Espíritu Santo.

Ya habían recibido la primera obra del Espíritu Santo, habían sido bautizados en el nombre de Jesús, habían nacido de nuevo y tenían el Espíritu Santo dentro de ellos; pero algo les faltaba.

Faltaba que el Espíritu Santo viniese sobre ellos, faltaba la segunda obra del Espíritu Santo; así que cuando Pedro y Juan oraron por ellos; recibieron el Espíritu Santo.

¿Cual fue la oración de Pedro y Juan? ¿”Señor, si es tu voluntad dales el Espíritu Santo”? 

¡No! El Espíritu Santo ya había sido derramado el día de Pentecostés, sencillamente oraron para que reciban la promesa que le había sido dada, para que reciban el Espíritu Santo.

En Hechos 19 vemos un caso similar:

Hechos 19:1-7 (RV60)
1 Aconteció que entre tanto que Apolos estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones superiores, vino a Efeso, y hallando a ciertos discípulos,
2 les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo.
3 Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos dijeron: En el bautismo de Juan.
4 Dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría después de él, esto es, en Jesús el Cristo.
5 Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús.
6 Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban.
7 Eran por todos unos doce hombres.

Estos doce discípulos de Juan, pasaron por las dos obras del Espíritu Santo, primero nacieron de nuevo al ser bautizados en el nombre del Señor Jesús y luego recibieron la segunda obra, el bautismo con el Espíritu Santo cuando Pablo les impuso las manos.

Ellos no oraron, ni pidieron, ni suplicaron. Lo único que hicieron fue recibir lo promesa que dios ya les había dado.

Pablo les había explicado claramente, así que solo recibieron cuando fueron ministrados.

Dentro de este punto veamos una creencia popular acerca del Bautismo con el Espíritu Santo.

Hechos 2:4-5 (RV60)
4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí.
5 Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días.

Hechos 2:4-5 (Castillian)
4 En cierto momento, mientras comía juntamente con ellos, les mandó que no se alejaran de Jerusalén, sino que esperasen el cumplimiento de la promesa del Padre de enviar al Espíritu Santo, tal como Jesús mismo les había anunciado que tenía que suceder. Se lo recordó diciéndoles:
5 Juan os bautizó con agua, pero dentro de pocos días seréis bautizados con el Espíritu Santo. 

Mucha gente al leer este verso piensa que debe esperar por el Espíritu Santo hasta ser bautizados con Él.

Hay gente que se pasa años esperando al Espíritu Santo, incluso hay gente que se ha pasado más de 50 años por el Espíritu Santo.

Un hermano se acercó a un ministro y le dijo con orgullo: “Hace 20 años que estoy esperando al Espíritu Santo, y se todo acerca de esperar al Espíritu Santo, no hay nadie que me pueda enseñar nada acerca del tema.”

El ministro le contesto: “Puede que sepas todo acerca de esperar pero no sabes nada acerca de recibir”.

Y eso es lo que pasa con muchísima gente porque han malentendido estos versos.

Yo le he dicho a mucha gente: “Si quieres ser verdaderamente bíblico, deberías irte a Israel a esperar, porque ese es el lugar donde Jesús le dijo que debían esperar; quizás ese sea el motivo que tu esperar no haya tenido fruto.”

Si leemos bien el verso veremos que las instrucciones que les dio Jesús es que esperasen en Jerusalén hasta que llegase el Espíritu Santo, lo cual ocurrió el día de Pentecostés tal como vemos en el capítulo 2 de Hechos.

Hechos2:1-4 (NVI)
4 Al cumplirse el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo lugar.
2 Y de repente sobrevino del cielo un ruido, como de un viento que irrumpe impetuosamente, y llenó toda la casa en la que se hallaban.
3 Entonces se les aparecieron unas lenguas como de fuego, que se dividían y se posaban sobre cada uno de ellos.
4 Quedaron todos llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les hacía expresarse. 

En ese momento, en Pentecostés, fue que el Espíritu Santo llegó y desde que llegó no se ha ido; se ha quedado con nosotros.

Como Jesús dijo en Juan 14; el Espíritu Santo iba a venir para quedarse con nosotros para siempre.

Juan 14:15-17 (NVI)
15 "Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos.
16 Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Consolador para que los acompañe siempre:
17 el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede aceptar porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará en ustedes. 

El Espíritu Santo, el Consolador, vino para quedarse, para estar siempre con nosotros.

Por ese motivo es que esta objeción no tiene sentido, no podemos esperar que llegue alguien que ya está con nosotros.

Hechos 2:32-33 (NVI)
32 A este Jesús, Dios lo resucitó, y de ello todos nosotros somos testigos.
33 Exaltado por el poder de Dios, y habiendo recibido del Padre el Espíritu Santo prometido, ha derramado esto que ustedes ahora ven y oyen. 

Jesús ya envió el Espíritu Santo, ya lo derramó sobre nosotros, solo nos toca recibir lo que el ya nos dio.


Segundo Paso
Debemos Mostrarle que Cumple con los Requisitos; Una Vez que ha Nacido de Nuevo Ya está Listo Para Recibir el Espíritu Santo

Muchas veces debido a la mala enseñanza y las tradiciones de la iglesia, los creyentes creen que necesitan hacer ciertas cosas antes de recibir. 

No se creen lo suficientemente santo o justos como para ser dignos de recibir el Espíritu Santo. 

Si esto fuera cierto, los hermanos de la iglesia de Corinto jamás hubieran recibido el Bautismo con el Espíritu, ya que eran la iglesia más carnal de todas.

Pero, ¿qué dice la Biblia?

1 Corintios 1:4-7 (RV60)
4 Gracias doy a mi Dios siempre por vosotros, por la gracia de Dios que os fue dada en Cristo Jesús;
5 porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia;
6 así como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros,
7 de tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo.

A la iglesia de Corinto no le faltaba ningún don, se puede decir que si no era la más carismática de todas las iglesias, por lo menos era una de las más carismáticas.

1 Corintios 3:1 (RV60)
1 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo. 

Era una iglesia muy carnal, sin embargo, todos eran bautizados con el Espíritu Santo.

Si los corintios lo fueron, hay esperanza para nosotros.

Así que no nos sintamos indignos y recibamos el regalo que Dios ya nos dio.

La pregunta es: ¿Cuáles son los requisitos para recibir el Bautismo con el Espíritu Santo.

Solo uno, haber nacido de nuevo.

Hechos 2:37-39 (RV60)
37 Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos?
38 Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.
39 Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.

Nuevamente, la promesa es para todos, el único requisito es el haber nacido de nuevo.

Por ese motivo, aunque hay mucha gente que dice que debemos ser maduros para poder recibir el Bautismo con el Espíritu Santo, en la Biblia vemos que no es así. La evidencia misma del Libro de los Hechos y la Epístola a los Corintios nos muestran que no puede haber sido así.

En los cinco casos del Libro de los Hechos: Pentecostés, los samaritanos, la casa de Cornelio, Pablo y los discípulos de Juan el Bautista en Efeso, ninguno de ellos había tenido tiempo para “madurar”, en el común de los casos eran recién convertidos.

Ya hemos comentado que la Iglesia de Corintos era todo menos una iglesia de gente madura, Pablo los llama carnales.

Veamos lo que Pablo le dice a la Iglesia de Filipos después de varios años de ministerio:

Filipenses 3:12-14 (BL95)
12 No creo haber conseguido ya la meta ni me considero un "perfecto", sino que prosigo mi carrera hasta conquistarlo, puesto que ya he sido conquistado por Cristo.
13 No, hermanos, yo no me creo todavía calificado, pero para mí ahora sólo vale lo que está adelante; y olvidando lo que dejé atrás
14 corro hacia la meta, con los ojos puestos en el premio de la vocación celestial, quiero decir, de la llamada de Dios en Cristo Jesús.

Filipenses 3:12-13 (Castillian)
12 No digo que haya logrado ya esa meta, ni que yo sea perfecto. Lo que pretendo es seguir adelante, tratando de ver si un día podré ser lo que Cristo, al salvarme, quiso que fuese.
13 No, hermanos, todavía no soy como debo ser; pero, eso sí, olvidando las cosas que voy dejando atrás y mirando a lo que está delante
14 procuro alcanzar la meta y recibir el premio celestial al que Dios me ha llamado por medio de Cristo Jesús.

Pablo no se considera “perfecto” o “maduro”, el sigue creciendo en el Señor cada día, sin embargo, ya había recibido el Bautismo con el Espíritu Santo.

No busquemos requisitos aparte del único que está establecido en la Biblia, haber nacido de nuevo. 




miércoles, 23 de septiembre de 2015

Qué es en realidad el don de lenguas

El Don de Lenguas




En cada lugar que he estado me he encontrado con hermanos que me decían que el don de lenguas no era para todos; y por lo tanto no era necesario que hablen en lenguas.

Esto sucedo porque no entienden la diferencia entre hablar en lenguas y el don de lenguas (ó diversos géneros de lenguas).

La Biblia enseña que aparte de nuestras lenguas privadas de oración hay un “lado público” de las lenguas.

Hemos estado viendo que la gente habla en otras lenguas cuando recibe el Bautismo con el Espíritu Santo.

Pero la Biblia nos habla acerca de un don o “carisma” del Espíritu Santo llamado el don de diversos géneros de lenguas.

Son similares en cuanto a su forma de manifestarse pero diferentes en cuanto a su aplicación.

El hablar en lenguas es para nuestra vida diaria de oración mientras que el don de lenguas sirve para traer un mensaje a la iglesia siempre que venga con su correspondiente don de interpretación de lenguas.

1 Corintios 14:5 (RV60)
5 Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación.

Pablo está diciendo que mayor es el que profetiza que el hablar en lenguas, a menos que interprete; es decir, que si las lenguas vienen con su respectiva interpretación son iguales que la profecía.

Por ejemplo, dos billetes de cincuenta dólares hacen uno de cien, pero cada uno de los billetes no es uno de cien, sin embargo al juntarse hacen uno de cien.

Es decir, el don de diversos géneros de lenguas y el de interpretación de lenguas por si solos son inferiores al don de profecía pero al juntarse tienen el mismo valor.

¿Para que sirve la profecía?

1 Corintios 14:5 (BAD)
5 En cambio, el que profetiza habla a los demás para edificarlos, animarlos y consolarlos.

1 Corintios 14:5 (BL95)
5 El que profetiza, en cambio, da a los demás firmeza, aliento y consuelo.

1 Corintios 14:5 (BPD)
5 En cambio, el que profetiza habla a los hombres para edificarlos, exhortarlos y reconfortarlos.

1 Corintios 14:5 (Castillian)
5 En cambio, el que profetiza habla a sus semejantes y se dirige a personas que, escuchando sus palabras, son edificadas espiritualmente, exhortadas y animadas. 

El don de profecía tiene como propósito: Edificar espiritualmente, animar, consolar, dar firmeza, alentar, exhortar y reconfortar.

Ese mismo propósito es el que tiene el don de lenguas acompañado del don de interpretación de lenguas.

El don de diversos géneros de lengua y el don de interpretación de lenguas son las dos caras de una moneda que se llama el don de profecía,

El don de profecía, es un mensaje inspirado y sobrenatural en una lengua conocida por el que la da y las personas que lo oyen; es el equivalente al don de lenguas con el don de interpretación de lenguas. 

El don de lenguas es un mensaje sobrenatural en lengua desconocida.

El don de interpretación de lenguas, es un mensaje inspirado y sobrenatural en lengua conocida que dice lo que ha sido hablado a través del don de lenguas.

Entonces el don de lenguas tiene un propósito específico, traer un mensaje a la congregación en una lengua que es desconocida por el que la da y por los oyentes que será interpretada (no traducida) por el don de interpretación de lenguas; y que será similar en su resultado al don de profecía.

Lo cual es completamente diferente al propósito de las lenguas que es nuestra edificación personal.

El don es para la congregación mientras que la lengua privada es para el creyente individual.

Otra cosa para notar es que en el Libro de Hechos no dice que los creyentes recibieron el “don de lenguas”.

Hechos 2:1-4 (RV60) 
1 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos.
2 Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados;
3 y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos.
4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.

Aquí dice que ellos comenzaron a hablar en otras lenguas no que recibieron el don de lenguas.

Hechos 10:44-46 (RV60)
44 Mientras aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el discurso.
45 Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del Espíritu Santo.
46 Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios. 

El don del Espíritu Santo que vemos aquí es el Bautismo con el Espíritu Santo, el cual vino con la evidencia de hablar en otras lenguas.

Hechos 19:1-7 (RV60)
1 Aconteció que entre tanto que Apolos estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones superiores, vino a Efeso, y hallando a ciertos discípulos,
2 les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo.
3 Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos dijeron: En el bautismo de Juan.
4 Dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría después de él, esto es, en Jesús el Cristo.
5 Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús.
6 Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban.
7 Eran por todos unos doce hombres. 

Vemos que estos doce hombres no recibieron el don de lenguas, ellos hablaron en lenguas.

Una cosa más es que Jesús dijo que los creyentes (todos) hablarían en lenguas.

Marcos 16: 17,18
17 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; 
18 tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán.   

Esto no lo mismo que sucede con el don de lenguas y con los dones del Espíritu Santo en general.

1 Corintios 12:30 (RV60)
30 ¿Tienen todos dones de sanidad? ¿Hablan todos lenguas? ¿Interpretan todos? 

La respuesta a estas preguntas es: No; no todos tienen el don de lenguas.

Lo primero que debemos entender es que los dones no son de la gente sino del Espíritu Santo.

1 Corintios 12:11 (BL95)
11 Y todo esto es obra del mismo y único Espíritu, que da a cada uno como quiere.

1 Corintios 12:11 (BLS)
11 Pero es el Espíritu Santo mismo el que hace todo esto, y el que decide qué capacidad darle a cada uno.

1 Corintios 12:11 (BPD)
11 Pero en todo esto, es el mismo y único Espíritu el que actúa, distribuyendo sus dones a cada uno en particular como él quiere. 

1 Corintios 12:11 (Castillian)
11 Pero siempre es uno y el mismo Espíritu el que concede tales dones y el que los reparte según su criterio y voluntad. 

En este caso no es la persona quien decide dar el mensaje que trae el don de lenguas; es Espíritu Santo es quien decide quien lo hace, según su criterio y voluntad.

Cuando la gente recibió el Bautismo Con el Espíritu Santo fueron ellos los que hablaron en lenguas, fue su propia decisión.

Hechos 2:4(RV60)
Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen. 

Al ser llenos del Espíritu Santo ellos comenzaron a hablar en otras lenguas según el Espíritu les daba que hablasen. El dio las palabras, y ellos las hablaron.

La Biblia de Weymouth dice “Ellos empezaron hablar conforme a las palabras que el Espíritu les dio que expresasen”. La Biblia en Lenguaje Sencillo dice: “Cada uno hablaba según lo que el Espíritu Santo le indicaba.”. La Biblia de Moffat dice: “Ellos empezaron a hablar en otras lenguas a medida que el Espíritu los capacitaba para expresarse.” 

Los creyentes solo estaban haciendo lo que el Espíritu les dio.

El hablar en lenguas es un acto basado en la voluntad humana. El hecho de que hable no es sobrenatural. La parte sobrenatural es lo que está siendo dicho y de dónde viene.

Eso es lo que lo diferencia del don de lenguas, en la que el Espíritu Santo escoge a la persona que traerá el mensaje.

Así que entendamos la diferencia para no perder nuestra bendición.

lunes, 21 de septiembre de 2015

Siete Razones Por Las Que Todo Creyente Debería Hablar En Lenguas

Siete Razones Por Las Que Todo Creyente Debería Hablar En Lenguas
Doy gracias a Dios que hablo en lenguas más que todos vosotros
- Primera de Corintios 14:18

Al leer el libro de Corintios lo que más nos salta a los ojos es ver el deseo de los corintos por hablar en lenguas.

Si Pablo habló en lenguas más que ellos, debe haberse despertado hablando en lenguas, irse a la cama hablando en lenguas, y hablar en lenguas entre comidas.  Todo el día se la pasaba hablando en lenguas.

Veamos las razones por las que todo creyente debe hablar en lenguas:


Razón 1
Las Lenguas Son La Señal  Inicial

Cuando recibimos el Bautismo con el Espíritu Santo hablamos en otras lenguas según el Espíritu nos da las palabras.

Esta es la evidencia o señal inicial de la segunda obra del Espíritu Santo en nosotros.

Hechos 2:4 (RV60)
4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen 

 Este fue el patrón en el Libro de Hechos, cuando los creyentes eran Bautizados con el Espíritu hablaron en lenguas.

Hechos 10:44-46 (RV60)
44  Mientras aún hablaba Pedro estas palabras,  el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el discurso.
45  Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del Espíritu Santo.
46  Porque los oían que hablaban en lenguas,  y que magnificaban a Dios. 

Los judíos se dieron cuenta que los gentiles habían sido bautizados con el Espíritu Santo porque los oyeron hablar en lenguas.

Pedro contando lo que pasó en la casa de Cornelio en el concilio de Jerusalén dijo lo siguiente:

Hechos 10:44-46 (RV60)
15  Y cuando comencé a hablar,  cayó el Espíritu Santo sobre ellos también,  como sobre nosotros al principio.
16  Entonces me acordé de lo dicho por el Señor,  cuando dijo: Juan ciertamente bautizó en agua,  mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo.
17  Si Dios,  pues,  les concedió también el mismo don que a nosotros que hemos creído en el Señor Jesucristo,  ¿quién era yo que pudiese estorbar a Dios?

Pedro cuenta que cuando vio que el Espíritu Santo se derramó en la casa de Cornelio tal como sucedió en Pentecostés, es decir, al oírlos hablar en lenguas, se dio cuenta de que habían recibido el Bautismo con el Espíritu Santo.

La forma que podemos saber que una persona ha recibido el Bautismo con el Espíritu Santo es cuando lo oímos hablar en lenguas.

Concluimos que la evidencia inicial de haber recibido el Bautismo con el Espíritu Santo es el hablar en lenguas.


Razón 2
Las Lenguas Son La Oración Perfecta

El orar en lenguas es la oración perfecta, solo Dios la entiende.

1 Corintios 14:2
2 Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios.

Cuando oramos en lenguas nadie nos entiende ni los hombres, ni el diablo, ni los ángeles, porque estamos hablándole misterios a Dios, y solo Él nos entiende.

La traducción The Message (El Mensaje) lo traduce de esta manera:

1 Corintios 14:2 (MSG)2  Si tú le alabas en el lenguaje privado de las lenguas, Dios te entiende pero nadie más lo hace, porque estas compartiendo intimidades entre tú y Él.

Cuando oramos en lenguas nadie más que Dios nos entiende porque estamos compartiendo un tiempo de intimidad con Él.

Moffat lo traduce así:

1 Corintios 14:2 (Moffat)
2 Porque el que habla en una “lengua” se dirige a Dios y no a los hombres; nadie le entiende; esta hablando secretos divino en el Espíritu.

Podemos concluir que Dios nos ha dado un medio sobrenatural para poder comunicarnos con Él. 

1 Corintios 14: 14
14 Porque si yo oro en lengua desconocida, mi espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto.

Veamos como lo dice la Versión Amplificada

1 Corintios 14:14 (AMP)
14 Porque si yo oro en una lengua (desconocida), mi espíritu (por el Espíritu Santo que está dentro de mi) ora, pero mi menta es improductiva (no lleva fruto ni ayuda a nadie)

Al orar en lenguas es nuestro espíritu el que ora, por el Espíritu Santo que está morando dentro de él.

Juan 4:23-24 (RV60)
23 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.
24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.

Dios Es espíritu, y en este periodo de la iglesia nos ha dado un medio para poder adorarlo en espíritu, las lenguas.

La oración en lenguas es la oración perfecta porque es hecha en el espíritu, nadie la entiende pues hablamos secretos divinos, y es un momento de comunión íntima con el Señor.


Razón 3
Las Lenguas Son Para Nuestra Edificación

Una segunda razón para hablar en lenguas es que sirven para nuestra edificación personal y crecimiento espiritual.

1 Corintios 14: 4
4 El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia.

La palabra edificación es el término griego oikodomeo, que es la palabra que se usa para construir una casa.

1 Pedro 2:5
5  vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.

Nosotros como casa espiritual recibimos nuestra edificación espiritual cuando oramos en lenguas.


Razón 4
Las Lenguas Nos Recuerdan La Presencia Del Espíritu Viviendo En Nosotros

El hablar en lenguas es una demostración sobrenatural que el Espíritu Santo vive en nosotros.

Jesús dijo en Juan 14:15-17: “Si me amáis,  guardad mis mandamientos. Y yo rogaré al Padre,  y os dará otro Consolador,  para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad,  al cual el mundo no puede recibir,  porque no le ve,  ni le conoce;  pero vosotros le conocéis,  porque mora con vosotros,  y estará en vosotros.

Jesús dijo que el Espíritu Santo es él consolador que iba a venir a vivir en nosotros.

Como hemos visto en Hechos 10:46, los judíos supieron que la salvación eran también para los gentiles “porque les oían que hablaban en lenguas”.

Ellos sabían que había una evidencia exterior de que una persona tenía el Espíritu Santo viviendo en él.

El hablar y orar continuamente en lenguas nos ayuda a estar conscientes de la presencia del  Espíritu, lo cual influirá en mi vida.

Razón 5Al Orar En Lenguas Oramos La Voluntad Perfecta De Dios 

Romanos 8:26 (RV60)
26 Y de igual manera  el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué  hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.

Es un hecho que muchas veces no sabemos como orar ó por que orar; en ese momento de debilidad es que el Espíritu Santo viene en nuestra ayuda

P.C. Nelson, un connotado maestro bíblico y un erudito del idioma griego.  Le decía a los jóvenes ministros  que el griego decía literalmente: “El Espíritu Santo mismo hace intercesión por nosotros con gemidos que no pueden ser expresados en lenguaje articulado” (lenguaje  articulado es la clase ordinaria de lenguaje).  El les dijo que el griego confirma que esto no sólo incluye “gemidos” en oración, sino también “otras lenguas”. 

El Espíritu Santo que vive en nosotros es quien nos da las expresiones;  Nosotros solo hablamos lo que sale de nuestro espíritu.  De ese modo el Espíritu  Santo nos ayuda a orar de acuerdo a la voluntad de Dios.

Cuando dice la frase el Espíritu mismo intercede por nosotros”; la palabra “por” es el término griego juper cuyo significado en Strong es:

πέρ jupér; prep. prim.; sobre, i.e. (con el gen.) de lugar, encima, más allá, a través, o causal, por causa de, en lugar de, respecto a; con el ac. superior a, más que:-por amor a, a favor, con gran insistencia, en lugar de, sobrepasar. [En composición retiene muchas de las aplicaciones indicadas.]

Una de las traducciones es “a través de”.

En el griego este término jupper es un pronombre personal en primera persona, de caso genitivo y en forma plural.

Veamos la palabra “genitivo” en el Diccionario de la Real Academia Española:

Gram. Uno de los casos de la declinación de algunas lenguas, generalmente de valores muy variados que puede denotar propiedad, posesión o pertenencia, el objeto sobre el que recae o que produce la acción transitiva expresada por un nombre, la cualidad o la cantidad de alguien o algo, el precio de lo que puede venderse, el todo del cual se menciona una parte, la naturaleza de algo, etc.

La palabra transitiva es: “(algo) Que pasa y se transfiere de uno a otro” (DRAE).

El objeto sobre el que recae somos nosotros, el que produce la acción transitiva es el Espíritu Santo.

El Espíritu Santo es quien da las palabras o “gemidos indecibles” y las transfiere a nosotros quienes realizamos la acción.

El Espíritu Santo no gime ni ora en lenguas sin nosotros. Esos gemidos vienen de nuestro interior y salen por nuestros labios.

Es lo que dice en Primera de Corintios 14:14: “Porque si yo oro en lengua desconocida, mi espíritu  ora, pero mi entendimiento queda sin fruto”. O como dice la Versión Amplificada: “Mi espíritu ora (por el Espíritu Santo que está en mi).

El Espíritu Santo ora con nosotros, no lo hace por si mismo, el da las palabra, nos las transfiere y nosotros hacemos la acción de orar. 

Razón 6
Orar En Lenguas Nos Ayuda A Orar Por Lo Desconocido


Esta razón es consecuencia de la anterior

Romanos 8:26 (BAD)
26 Así mismo, en nuestra debilidad el Espíritu acude a ayudarnos. No sabemos qué pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras.

Romanos 8:26 (Castillian)
26 De igual manera, el Espíritu Santo nos ayuda a superar nuestra humana debilidad; porque ni siquiera sabemos qué debemos pedir ni cómo pedirlo, y es el Espíritu Santo el que ora por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras.

A veces no sabemos que cosa orar ni como orar. Hay cosas que ni nos imaginamos que están sucediendo, pero el Espíritu Santo si lo sabe, en ese momento el nos mueve a orar en lenguas.

Cuando en el Centro de Entrenamiento Bíblico, una tarde como a las seis tuve una impresión de orar por una persona, no sabía que le pasaba, por tanto no sabía que orar.

Así que empecé a orar en lenguas por una hora, hasta que se levantó esa carga de oración.

Al día siguiente le pregunte que le había pasado ayer entre las seis y siete de la noche; ella me respondió que durante esas horas había tenido unas ganas muy fuertes de suicidarse, pero a las siete esas ganas cesaron y desde entonces no volvió a tenerlas.

¿Cómo podía yo saber eso? No había manera, pero el Espíritu Santo me guió y me dio las palabras para que las hable en lenguas.

El orar en lenguas nos ayuda a orar por situaciones que nadie conoce o se imagina; así que seamos sensibles al Espíritu Santo y oremos en lenguas cuando el Espíritu Santo nos guíe.


Razón  7
Orar En Lenguas Sobreedifica Nuestra Fe

Judas 20
20 Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo.

El orar en lenguas ayuda y estimula nuestra fe. El orar en lenguas nos  ayuda a aprender a confiar en Dios más plenamente. El hablar en lenguas ayuda a mi fe.

Veamos lo que dice la versión The Message (El Mensaje).

Judas 1:20 (MSG)
20 Pero ustedes, queridos amigos, edifíquense cuidadosamente en esta santísima fe por medio del orar en el Espíritu Santo. 

Aquí la término que se usa para edificar es epoikodomeo, veamos su significado en Strong:

epoikodoméo; construir sobre, i.e. (fig.) criar:-sobreedificar, edificar encima.

Al orar en lenguas construimos encima de algo que ya tenemos, sobreedificamos; el orar en lenguas no me da fe sino ayuda y edifica a mi fe.

El hecho de que cada vez que hablo en lenguas tengo que usar mi fe; y creer que seguiré hablando una y otra vez; esto me sirve de ejercicio espiritual.

El hecho de que mi fe funciona en esta área me ayudará a creer que mi fe funcionará en otras.