Lo que es la fe - Parte 3
La Fe es la Evidencia de lo que No
Se Ve
Veamos ahora la segunda parte
de Hebreos 11:1
Dice que la fe es una
evidencia.
Vine lo coloca así:
elencos, que
denota una prueba, demostración, ensayo, como en Hebreos 11:1: «convicción»; VM:
«prueba».
Wuest nos da una idea más
amplia:
La palabra "prueba" es la traducción de elencos que significa, "una prueba, aquello por lo cual una cosa se demuestra o es probada." Thayer al comentar sobre su uso aquí la define de la siguiente manera: "aquello por lo que las cosas invisibles son probados y estamos convencidos de su realidad." Su segunda definición de la palabra es "convicción".
Entonces la fe es la prueba que
nos demuestra que las cosas que no vemos ya son nuestras.
Hace unos años estaba en la
ciudad minera de Calama, en la Segunda Región de Chile; recién habíamos llegado
a la ciudad y fuimos a almorzar con el pastor que me invitó. Cuando salimos del
restaurante vimos que la ventana trasera del furgón del pastor estaba abierta y
faltaban dos maletas. Una de ellas tenía mi pasaporte, mi dinero y toda mi
ropa.
Cuando nos dimos cuenta, el
diablo empezó a decirme: “Hoy día vas a predicar con blue jean y polera.” Yo
le respondí: “No, diablo, la Biblia dice en Proverbios 6:30-31 que si el
ladrón fuese descubierto devolverá siete veces, así que tu me vas a devolver
siete veces lo que me has robado.”
Fuimos a la estación de
carabineros, y mientras esperaba que me atendieran ví que entraba un carabinero
con dos maletas; el capitán me preguntó: “¿Para qué ha venido?” Yo le
respondí: “Para recoger mis maletas.”
Me pidieron que revisara el
contenido y vimos que no faltaba nada.
Al cabo de tres semanas había
recibido siete veces más de lo que me había robado el diablo.
¿Qué me dio la confianza de que
iba a recuperar mis cosas? ¿Qué me dio la seguridad de que iba a recibir siete
veces más? La fe, la fe en la Palabra de Dios.
La fe en Dios cree en la
Palabra de Dios a pesar de las circunstancias en las que estemos.
Como decía Agustín de Hipona:
“Fe es creer lo que no se ve y la recompensa es ver lo que uno cree.”
2 Corintios 4:18
18 no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que
no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son
eternas.
¿Qué es algo temporal? Una cosa
que está sujeta a cambio.
El problema o necesidad que
tienes puede cambiar; no importa cual sea la circunstancia que estés pasando,
está sujeto a cambio.
¿Existe algo que sea eterno?
Si, la Palabra de Dios
Mateo 24:35
35 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no
pasarán.
La Palabra de Dios es eterna.
Santiago 1:16-17
16 Amados hermanos míos, no erréis.
17 Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo
alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de
variación.
El verso 16 en la Biblia en
Lenguaje Sencillo dice: “Mis queridos
hermanos, no sean tontos ni se engañen a ustedes mismos.”
El verso 17 en la Biblia Castilian: “Todo lo que recibimos de bueno y perfecto
procede de Dios, creador de todas las luces del universo y en quien no hay
cambio alguno ni sombra de variación”; y en la Biblia al Día: “Toda buena dádiva y todo don perfecto
descienden de lo alto, donde está el Padre que creó las lumbreras celestes, y
que no cambia como los astros ni se mueve como las sombras”.
Entonces podemos leer este verso así: “Amados hermanos no sean tontos, ni se
equivoquen ni engañen, todo lo bueno y perfecto que recibimos viene de Dios,
que creó las luces del universo y no cambia como los astros ni se mueve como
las sombras.”
Malaquías 3:6
6 Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob,
no habéis sido consumidos.
Dios no es un ser inconstante,
ni variante, ni cambiante; Él sigue siendo siempre el mismo; y Su Palabra
tampoco cambia.
Dios no es hombre para que
mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta, las cosas que ha dicho las
cumplirá en nuestra vida; Él apresura su Palabra para ponerla por obra (Números
23:19, Jeremías 1:12).
Podemos caminar confiados
porque tenemos un Dios que cumple perpetuamente Su Palabra a nuestro favor.
Las circunstancias o problemas
que pasemos son cosas temporales que cambian cuando ponemos lo eterno en
nuestras vidas.
Si las circunstancias te hacen
sentir enfermo solo debes declarar lo que dice 1 Pedro 2:24: “Soy sano por
las llagas de Jesús.”
Si tienes problemas financieros
solo cree lo que dice Filipenses 4:19: “Mi Dios suplirá todo lo que me falta
conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.”
La Palabra de Dios tiene la
respuesta a tus problemas.
Romanos 4:16-22
16 Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin
de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que
es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre
de todos nosotros.
17 (como está escrito: Te he puesto por padre de muchas
gentes) delante de Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama
las cosas que no son, como si fuesen.
18 El creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a
ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu
descendencia.
19 Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que
estaba ya como muerto (siendo de casi cien años), o la esterilidad de la matriz
de Sara.
20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios,
sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios,
21 plenamente convencido de que era también poderoso para
hacer todo lo que había prometido;
22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia.
Abraham no creyó lo que sus
sentidos le decían, no creyó lo que sus ojos veían; él estaba completamente
convencido de que Dios iba a cumplir la promesa que le había hecho y su fe
trajo como resultado el nacimiento de su hijo Isaac cuando tenía cien años.
Abraham no miró las cosas que
se veían, sino lo que no se veía la palabra de Dios.
Proverbios 4:20-22
20 Hijo mío, está atento a mis palabras; Inclina tu oído
a mis razones.
21 No se aparten de tus ojos; Guárdalas en medio de tu
corazón;
22 Porque son vida a los que las hallan, Y medicina a
todo su cuerpo.
Nuestros ojos siempre deben
estar firmes en la Palabra de Dios, sabiendo que ella nos va ha traer las cosas
que estamos deseando.
La fe siempre está viendo la
Palabra de Dios y tomándola como una realidad aunque las circunstancias por las
que estemos pasando parezcan ser contrarias a lo que Dios promete.