domingo, 28 de febrero de 2021

El Injerto

El Injerto




Por lo demás, al ser santos, por estar consagrados a Dios, los primeros frutos o primicias que se hacen de una masa, toda la masa lo será; y, al ser santa la raíz de un árbol, también lo serán las ramas.
Es verdad que algunas ramas fueron desgajadas y que entre las que quedaban tú que eras olivo silvestre fuiste injertado entre ellas, y de esa manera llegaste a participar de la misma raíz y compartir de la rica y nutritiva savia del olivo.
Romanos 11:16-17 (Biblia Expandida de Fe)

Para poder entender lo que Pablo está hablando debemos definir las figuras que él utiliza:

Las Primicias

Lo primero que Pablo nos habla es de las primicias o primeros frutos.

Vernon McGee quien durante años transmitió el programa radial "A través de la Biblia", nos dice esto:

Las “primicias” evidentemente se refiere al origen de la nación: Abraham, Isaac y Jacob. 

La Masa

Marvin Vincent, autor del famoso comentario: "Estudios de la Palabra en el Nuevo Testamento"; escribió en el Siglo XIX:

"La masa" es todo el cuerpo de las personas. La aparente confusión de la metáfora, primicias, masa, se resuelve por el hecho de que los primeros frutos no se aplica exclusivamente a la cosecha, sino que es el término general para la primera parte de todo lo que se ofrecía a Dios. La referencia aquí es Números 15:18-21; según el cual los israelitas tenían que apartar una porción de la masa de cada cocción de pan para un pastel para los sacerdotes. Esto fue llamado primicias.

La masa está hablando del pueblo de Israel.

La Raiz

Archibald Thomas Robertson, otro conocido comentarista, autor del famoso libro de consulta "Imágenes de la Palabra en el Nuevo Testamento", escribió a inicios del Siglo XX:

La raíz; tal vez solamente Abraham aquí. La metáfora cambia, pero la idea es la misma. Israel es visto como un árbol. Pero hay que recordar y tener en cuenta el doble sentido de Israel en Romanos 9:6, lo natural y lo espiritual.

El Árbol

Del comentario anterior podemos ver que el árbol parece referirse a Israel.

Las Ramas

John MacArthur, en su Comentario Bíblico del 2005 dice acerca de las ramas"Los descendientes de los patriarcas: la nación de Israel."

El Olivo Natural y el Olivo Silvestre

Robertson nos dice aquí lo siguiente:

Siendo olivo silvestre. Esta palabra, usada por Aristóteles, se produce en una inscripción. Ramsay muestra que los antiguos usaban el injerto de un olivo silvestre en un viejo olivo para revitalizar el árbol tal como Pablo usa la figura de aquí y que tanto el olivo y el injerto eran influenciados entre sí, aunque el injerto del olivo silvestre no producía tan buenas aceitunas como la población original. Pero hay que señalar que, en Romanos 11:24 Pablo declara expresamente que el injerto de los Gentiles en el balance del Israel espiritual era “contrario a la naturaleza”.

Entonces, vemos que el olivo natural se esta refiriendo al Israel espiritual y el olivo silvestre a los gentiles que serían injertados.

Las Ramas Injertadas

Vincent nos dice acerca de las ramas injertadas:

Has sido injertado en lugar de ellas. Este verbo se encuentra sólo en este capítulo. Viene de picadura, aguijón. Por lo tanto, en el verbo injertar se hace hincapié en la incisión. Algunos colocan en su lugar, en vez de entre ellos, pero esta última está más de acuerdo con hecho de ser participante. De ahí que la referencia no es a algunas de las ramas desgajadas en lugar del cual los Gentiles fueron injertados, pero a las ramas en general. 

Vemos aquí que el injerto más que una sustitución de las ramas desgajadas fue un injerto en medio de las ramas del olivo que habían quedado.

Y esto es una figura de lo que es la iglesia, la unión de dos pueblos, los israelitas y los gentiles para formar uno solo.

El Participar de la Raiz y de la Savia del Olivo

Barton W. Johnson, en su comentario "El Nuevo Testamento de la Gente", escribió en el Siglo XIX acerca de esto:

Con los cristianos judíos, estos cristianos gentiles se hicieron partícipes de todas las bendiciones pertenecientes a la simiente de Abraham.

Y John MacArthur lo confirma:

La raíz y de la savia. Una vez injertados, los gentiles participan de la riqueza de las bendiciones del pacto de Dios a los herederos espirituales de Abraham.  

Conclusiones

El hecho de que los gentiles hayamos sido injertados dentro del olivo natural significa que ahora formamos parte de la iglesia, pero no solo eso, sino que por el hecho de ello participamos de la raíz y de la rica y nutritiva savia del olivo, que son todas las bendiciones y privilegios del pacto que Dios hizo con Abraham.

Somos herederos del Pacto de Dios con Abraham. 


Escrito por Ricardo Botto

sábado, 27 de febrero de 2021

Mi Esperanza

Mi Esperanza



Me dirijo ahora a ustedes gentiles (que no son de origen judío). Precisamente porque Dios me ha enviado como apóstol a los gentiles, tengo que llevar a cabo con empeño mi tarea personal, cumplir con mi oficio y honrar mi ministerio.
Con la esperanza que de alguna manera haga reaccionar a los de mi raza, mis compatriotas judíos, para que les entren celos y les provoque envidia para así conseguir salvar a algunos de ellos.
Porque es un hecho  que si el fracaso y exclusión de los judíos ha servido para que el mundo vuelva a estar en paz con Dios, recibiendo los beneficios de la salvación y siendo reconciliados con Él ¿Qué tanto más pasará cuando Dios los acepte nuevamente y sean readmitidos? Será como una resurrección, la vuelta de los muertos a la vida.
- Romanos 11:13-15 (Biblia Expandida)

Pablo no solo honraba su ministerio cómo apóstol de los gentiles sino que tenía un sueño, una esperanza que él proclamaba a gritos y era que el deseaba la conversión de los suyos.

Ya en Deuteronomio 32:21 Dios le había dicho a Israel: "Yo también los moveré a celos con un pueblo que no es pueblo, los provocaré a ira con una nación insensata." 

Pablo esperaba cumplir su ministerio a los gentiles llamando la atención de los judíos hacia las antiguas profecías; los alarmantes temores del peligro que corrían, y mostrándoles los grandes privilegios que los gentiles disfrutaban con el evangelio, apelando a ellos por todos los principios de la benevolencia, por toda su atención a Dios y a los hombres, para entusiasmarlos a buscar las mismas bendiciones.

Esa fue la esperanza de Pablo, predicaba con un propósito. 

viernes, 26 de febrero de 2021

Honrando nuestro ministerio

Honrando nuestro ministerio


Me dirijo ahora a ustedes gentiles (que no son de origen judío). Precisamente porque Dios me ha enviado como apóstol a los gentiles, tengo que llevar a cabo con empeño mi tarea personal, cumplir con mi oficio y honrar mi ministerio.
- Romanos 11:13 (Biblia Expandida)

Pablo sabía quien era y sabía a que había sido llamado, su llamado era hacia los gentiles, él era "El Apóstol de lo Gentiles."

En 1 Corintios Pablo nos habla de su ministerio como apóstol.

1 Corintios 15:9-10
9 Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios.
10 Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.

Luego de su relato de los que vieron a Jesús después de la resurrección y hablar de los apóstoles, él dice que también era uno, que era un apóstol por la gracia de Dios y según esa gracia él había trabajado aún más que todos ellos.

Si eres llamado al ministerio Dios te ha dado una gracia ministerial para cumplir con aquello que Él te ha encomendado. Una unción especial para cumplir con la obra para la cual has sido llamado.

Dios es el que te convierte en alguien, no éramos nadie , pero ahora somos sus hijos y con una función por cumplir.

Veamos que Pablo aunque tenía esta gracia para ser apóstol de los gentiles no se quedó con los brazos cruzados. Él dice: "Tengo que llevar a cabo con empeño mi tarea personal, cumplir con mi oficio y honrar mi ministerio."

No era suficiente con la gracia, ahora él tenía que hacer la obra del ministerio.

Mi llamado es para ser maestro, ese es mi don ministerial, pero la gracia por si sola no es suficiente, debo abrir mi Biblia y estudiarla, utilizar varias versiones, comentarios, diccionarios, mapas y todo tipo de ayudas para poder entender y enseñar la Palabra.

Si, por ejemplo, fuiste llamado a ser evangelista, tendrás que salir a la calle y predicarle a la gente, orar por los enfermos y ganarlos para Cristo.

Sea cual sea tu ministerio, y de acuerdo a la gracia que haz recibido, debes llevar a cabo con empeño tu tarea personal, cumplir con tu oficio y honrar tu ministerio.

¡Honra tú ministerio!


Escrito por Ricardo Botto

jueves, 25 de febrero de 2021

Un pequeño resbalón

Un pequeño resbalón

Aún tengo más que preguntar: ¿Habrán tropezado y caído los israelitas a su ruina espiritual de tal manera que ya no puedan levantarse? ¡De ningún modo! Su paso en falso, es decir, su desobediencia, transgresión, y caída han servido, más bien, para que las demás naciones puedan salvarse, provocando así que Israel tenga celos y envidia.
Y si su mal paso y caída ha enriquecido y sido provechosa para el mundo entero, si su fracaso y disminución ha contribuido a la riqueza y grandeza de las demás naciones, díganme: ¿cuánto más beneficioso será cuando todos los israelitas se conviertan y lleguen a su plena restauración futura?
- Romanos 11:11-12 (Biblia Expandida de Fe)

Pablo continúa aquí con el tema de Israel.

Como hemos visto antes, Israel tropezó con la piedra de tropiezo que es Cristo. Ellos trataban de justificarse mediante el cumplimiento estricto de la Ley, pero nunca podían llegar a conseguirlo; y habiendo escuchado de la obra de Cristo en la cruz, no hicieron caso, prefirieron seguir con la Ley, y tropezaron.

Israel había puesto su confianza y seguridad en la Ley y habían rechazado la salvación gratuita que Dios había provisto para ellos, y solo había quedado un remanente que había decidido creer en Jesús como Señor de sus vidas.

La pregunta es si esa actitud de Israel iba a determinar el rechazo de Dios para siempre.

Pablo dice que no, que solo había sido un tropezón de Israel, que Dios tenía un plan futuro para ellos, su plena restauración.

Además este rechazo de Israel había sido una gran bendición para todas las naciones gentiles ya que el Evangelio fue predicado entre ellos y llegó gran salvación.

Dios no ha desechado para siempre a Israel, pero un pequeño resbalón, trajo una gran salvación.


Escrito por Ricardo Botto



miércoles, 24 de febrero de 2021

La Mesa Entrampada

La Mesa Entrampada

Romanos 11:7-10 (Biblia Expandida de Fe) 
7 ¿Qué significa todo esto? Pues que no todo Israel ha conseguido lo que buscaba. En cambio, lo ha logrado el remanente, que son los elegidos por Dios, mientras que los demás se han enceguecido, entercado, encallecido y endurecido.
8 tal como dicen las Escrituras: Dios les dio un espíritu de adormecimiento, aturdimiento, entorpecimiento, estupor y embotamiento, ojos con los que no ven y oídos con los que no oyen, hasta el día de hoy.
9 Y David dice: Que su mesa de banquete se convierta en lazo y en trampa, y en piedra de tropiezo donde se caigan y arruinen ellos mismos, y en retribución y castigo merecido para ellos.
10 Que sus ojos se nublen y oscurezcan al punto de no ver, y que se les encorve la espalda para siempre.

Continuando con la discusión acerca del remanente de Israel, Pablo nos da el motivo por el cual la mayoría de Israel no entró en él.

Israel había puesto su confianza en la Ley, su mesa de banquete eran las promesas que Dios les había hecho como nación y su confianza en ser la nación elegida por Dios.

No se dieron cuenta que eran el instrumento por medio del cual entraría el Mesías al mundo, no se dieron cuenta de su importancia y solo pusieron sus ojos en el cumplimiento de la Ley.

Al hacer esto desecharon la justicia que Dios había provisto por medio de la obra de Cristo, y solo un remanente creyó que Jesús era su Mesías.

El resto, los que pusieron su confianza en la  Ley, no llegaron a alcanzar la salvación que Cristo había ganado para ellos.

¿Que nos dice eso hoy eso a nosotros?

La importancia de saber donde estamos poniendo nuestra confianza, ¿en nuestras acciones? ¿en nuestras obras? 

Israel colocó su confianza en las obras de la Ley y fracasó completamente.

El remanente puso su confianza en la obra de Cristo y alcanzó la salvación.

Ese es el lugar de tu confianza, la obra de Cristo en la cruz, en la cual el obtuvo tu salvación y todos los beneficios que vienen con ella.


Escrito por Ricardo Botto

martes, 23 de febrero de 2021

Dos Sistemas Diametralmente Opuestos

Dos Sistemas Diametralmente Opuestos





Así también en el tiempo presente subsiste un remanente escogido por gracia.
Pero si es por gracia, ya no es a base de obras ni méritos humanos, de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra.
- Romanos 11:5-6

Aquí Pablo sigue hablando del pueblo de Israel, nos acaba de dar dos pruebas contundentes que Israel no ha sido rechazado por Dios y ahora nos va a dar la clave de porque aparentemente parece que fueron rechazados.

Ya en los versículos anteriores nos ha mostrado que en la época de Elías hubo un remanente de 7000 hombres que no se postraron ante Baal, y que lo mismo estaba sucediendo en el tiempo de Pablo.

Había un remanente o resto que había sido guardado por gracia, algunas personas tratan de hablar de una elección individual, pero en este pasaje está hablando de un grupo de personas.

Vine nos dice de este remanente lo siguiente: "En el versículo 5, 'un remanente escogido por gracia' se refiere a los judíos creyentes, salvados de entre la nación incrédula."

En Hechos capítulos 2 y 3 podemos ver como esto funcionó, cuando los judíos escucharon la predicación en Pentecostés se convirtieron 3 mil hombres (no contaron mujeres y niños); y en la sanidad del cojo que se sentaba en la puerta llamada La Hermosa se convirtieron 5 mil.

Ya vimos en Romanos 10 que por todo el mundo salió la voz de ellos con un mensaje, la redención por medio de la obra de Cristo.

B. W. Johnson dice acerca de la palabra "elegidos" en este pasaje: ""La elección" significa "los elegidos", y este término se aplica a todos los creyentes. Aquí se limita a la parte del pueblo elegido, Israel, que habían aceptado a Cristo, y por lo tanto eran un remanente. Que la "elección" no significa un decreto que un individuo será salvo eternamente se muestra por 2 Pedro 1:10: "Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás." Si un individuo fue elegido antes de los siglos para la salvación eterna por un decreto divino, ninguno de sus actos podría hacer más segura su elección. La elección de las Escrituras es una que requiere diligencia de nuestra parte, y el esfuerzo para no caer",

¿Que hizo que nos encontremos con estos dos grupos, el remanente y el resto de los israelitas?

Lo que hizo la diferencia es el método que utilizaron para justificarse delante de Dios; entendiendo que al hablar de justificación nos referimos al acto de ser declarados justos e inocentes delante de Dios.

Israel trató de justificarse delante de Dios por sus propios méritos, a través del cumplimiento estricto de la ley, pero eso no los llevó a ningún lado porque por medio de la ley ningún hombre puede justificarse ante Dios.

Romanos 3:19-20 (Biblia Expandida)
19 Ahora bien, nosotros sabemos que todo lo que dice la Ley es válido para los que están bajo la Ley, a fin de que toda boca se calle y nadie pueda alegar inocencia y todo el mundo sea condenado bajo el juicio de Dios.
20 Porque ante los ojos de Dios, ningún ser humano será justificado (declarado inocente y hecho justo) por medio del cumplimiento de las obras de la Ley, ya que la Ley se limita a hacernos conocer completa y concientemente el pecado.

Lo que hacía la ley no era justificarlos sino ponerles una conciencia de pecado, demostrándoles que era pecadores.

Lo único que hacía la ley era ponerlos en maldición:

Gálatas 3:10-13
10 Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas.
11 Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá;
12 y la ley no es de fe, sino que dice: El que hiciere estas cosas vivirá por ellas.
13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero.

Los que querían justificarse mediante la ley estaban en problemas porque nadie podía justificarse ante Dios medio de la ley; y encima había una maldición para todo él que no la cumpliera intachablemente.

Pero había una solución para el hombre: Cristo nos redimió de la maldición de la ley.

Romanos 3:21-26 (Biblia Expandida)
21 Pero ahora, aparte e independientemente de la Ley, se ha manifestado abiertamente la justicia de Dios que es testificada y confirmada por la Ley y los Profetas;
22 la justicia de Dios, que es por la fe en Jesucristo, para todos los que creen. Porque no existe ninguna distinción ni diferencia
23 porque todos han pecado y están privados de la gloria de Dios,
24 pero son justificados (declarados inocentes y hechos justos) gratuitamente por medio de su gracia (que es el favor y la buena voluntad de Dios hacia nosotros) provista por medio de la redención cumplida en Jesucristo (el Salvador Ungido)
25 quien fue puesto por Dios como instrumento de propiciación por medio de su propia sangre, a través de la fe.
26 De esa manera, Dios ha querido mostrar su justicia al haber pasado por alto en su paciencia nuestros pecados pasados para demostrar en este tiempo Su justicia, a fin de que Él sea Él justo y el justificador del que tiene fe en Jesús.

El remanente se dio cuenta que esta justificación ya había sido anunciada por la Ley y los Profetas, que el Mesías, Jesucristo, venía al mundo para morir por todos los hombres y darles vida eterna.

Se dieron cuenta que no era por medio del cumplimiento de la Ley que serían justificados sino por la gracia de Dios, a través de la fe en Jesucristo.

Efesios 2:8-9
8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;
9 no por obras, para que nadie se gloríe.

No eran las obras las que traería este regalo que es la salvación sino la misma gracia de Dios, su favor inmerecido, ese amor sin limites que Dios tiene hacia los hombres.

Por ese motivo Israel estaba equivocado al tratar de justificarse ante Dios por sus obras.

Romanos 3:27-28 (Biblia Expandida)
27 Entonces, ¿en qué se fundamenta la jactancia? Ha sido excluida y eliminada. Pero, ¿en virtud de qué ley se excluye ese derecho? ¿Por la ley de las obras? No, sino por la ley de la fe.
28 Por eso concluimos y afirmamos que el hombre es justificado por la fe con independencia total de las obras de la Ley.

El remanente se dio cuenta de esto, la fe en Jesucristo, la fe en esa obra de gracia por nosotros es lo que los haría justos ante Dios.

Entonces vemos que de estos dos métodos solamente uno nos justifica ante Dios, la salvación gratuita de Dios por medio de la fe en Jesucristo.

Y tú, ¿te estas justificando delante de Dios por tus obras o por medio de la fe en Jesucristo?


Escrito por Ricardo Botto

domingo, 21 de febrero de 2021

La Segunda Prueba de que Dios No Desechó a Israel: Elías

La Segunda Prueba de que Dios No Desechó a Israel: Elías


Romanos 11:2-4 (Biblia Expandida)
2 No, Dios no ha repudiado ni rechazado al pueblo que de antemano había conocido y reservado para sí. ¿Acaso no saben lo que relata la Escritura acerca del profeta Elías cuando se quejaba, acusaba e interpelaba a Dios en contra de Israel?
3 Señor, han asesinado a tus profetas y han derribado, demolido y destruido tus altares. Yo soy el único profeta que ha quedado con vida, y aun así acechan contra mí para también matarme.
4 Pero ¿cuál fue la respuesta divina? Me he reservado siete mil hombres que nunca han adorado ni doblado la rodilla ante el dios Baal.

En el primer versículo vemos que Pablo se presentaba como la primera prueba de que Dios no había rechazado a Israel.

Ahora nos va a presentar su segunda prueba, el profeta Elías y los siete mil hombres que no se habían postrado ante Baal.

1 Reyes 19:9-18 (Dios Habla Hoy)
9 Allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Llegó a él palabra de Jehová, el cual le dijo: –¿Qué haces aquí, Elías?
10 Él respondió: –He sentido un vivo celo por Jehová, Dios de los ejércitos, porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares y han matado a espada a tus profetas. Solo yo he quedado y me buscan para quitarme la vida.
11 Jehová le dijo: –Sal fuera y ponte en el monte delante de Jehová. En ese momento pasaba Jehová, y un viento grande y poderoso rompía los montes y quebraba las peñas delante de Jehová; pero Jehová no estaba en el viento. Tras el viento hubo un terremoto; pero Jehová no estaba en el terremoto.
12 Tras el terremoto hubo un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego se escuchó un silbo apacible y delicado.
13 Cuando Elías lo oyó, se cubrió el rostro con el manto, salió y se puso a la puerta de la cueva. Entonces le llegó una voz que le decía: –¿Qué haces aquí, Elías?
14 Él respondió: –He sentido un vivo celo por Jehová, Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares y han matado a espada a tus profetas. Solo yo he quedado y me buscan para quitarme la vida.
15 Jehová le dijo: –Ve, vuelve por el mismo camino, hacia el desierto de Damasco. Llegarás y ungirás a Hazael como rey de Siria.
16 A Jehú hijo de Nimsi lo ungirás como rey de Israel, y a Eliseo hijo de Safat, de Abel-mehola, lo ungirás como profeta para que ocupe tu lugar.
17 Al que escape de la espada de Hazael, Jehú lo matará, y al que escape de la espada de Jehú, Eliseo lo matará.
18 Pero haré que queden en Israel siete mil, cuyas rodillas no se doblaron ante Baal y cuyas bocas no lo besaron.

Después de su gran triunfo ante los profetas de Baal, Elías se sentía frustrado, creía que era el último de los profetas de Dios.

Dios le pregunta: "¿Qué estás haciendo?"

Y Elías empieza a quejarse de Israel ante Dios: "He sentido un vivo celo por Jehová, Dios de los ejércitos, porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares y han matado a espada a tus profetas. Solo yo he quedado y me buscan para quitarme la vida."

Y Dios le responde: "En Israel hay siete mil, cuyas rodillas no se doblaron ante Baal y cuyas bocas no lo besaron."

Dios le está diciendo, no estás solo, no he desechado a Israel, me he guardado un remanente.

Pablo utiliza esta historia como una prueba de que Dios no ha rechazado a Israel.

En ese momento de crisis nacional, en medio del momento de mayor angustia y declinación de la religión, cuando han ocurrido que muchas cosas desalentadores en el mismo período de tiempo. Los profetas de Dios habían sido asesinados, la nación entera estaba corriendo hacia la idolatría, y los gobernantes eran criminalmente malvados y líderes de la apostasía general. Cuando todas las influencias de la riqueza y el poder estaban puestas en contra de la religión verdadera para destruirla Dios no había desechado a Israel.

Y eso les dice Pablo, si en un momento así Dios no desechó a Israel, cuanto más ahora.

Elías y los siete mil hombres son la segunda prueba que Dios no rechazó a Israel.


sábado, 20 de febrero de 2021

¡Yo Soy La Prueba!

¡Yo Soy La Prueba!


Y ahora pregunto: ¿Habrá Dios repudiado y rechazado totalmente a su pueblo?
¡De ningún modo!
(Recuerden) Que también yo soy israelita, descendiente de Abraham y originario de la tribu de Benjamín.
- Romanos 11:1 (Biblia Expandida)

Durante siglos se ha considerado al pueblo de Israel como un pueblo desechado, perseguido, sin tierra, maltratado y sin fin de cosas. La gente ha considerado que Dios rechazó a su pueblo.

Pero, al final del capítulo 10 de Romanos hemos visto que no fue Dios quien rechazó a Israel sino que ellos mismos se negaron a escuchar la Palabra que fue predicada en todo el mundo acerca de Jesucristo.

Aquí Pablo responde a la pregunta, ¿Habrá Dios repudiado y rechazado totalmente a su pueblo?, de la manera más enfáticamente posible (en el griego): ¡De ningún modo!

Pablo les dice:

"No, Dios no ha rechazado ni repudiado a Israel y yo soy la prueba: (Recuerden) Que también yo soy israelita, descendiente de Abraham y originario de la tribu de Benjamín."

Pablo mismo es la prueba de que Dios no rechazó a Israel porque el mismo es israelita.

Wuest dice: "Un israelita es un judío tal como se le ve como un miembro de la teocracia y por lo tanto un heredero de las promesas que Dios le dio a esa nación. Este es el título más augusto de los tres nombres, un hebreo de lengua hebrea como en contra de un Judío de habla griega o un Judío griego, mientras que un Judío es un judío en su distinción nacional de un gentil. Pablo también es hijo de Abraham, y él viene de la tribu de Benjamín".

Jamieson, Fausset y Brown amplían más esta verdad: "de la simiente de Abraham—descendiente directo del padre de los fieles. de la tribu de Benjamín la cual, cuando se rebelaban las diez tribus, constituyó con Judá el reino fiel de Dios, y después del cautiverio fué, junto con Judá, el corazón de la nación judaica."

En Filipenses 3:4-5 Pablo reafirma esto: "Aunque yo tengo también de qué confiar en la carne. Si alguno piensa que tiene de qué confiar en la carne, yo más: circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo."

Pablo les dice nadie puede atreverse a decir que Dios rechazó a Israel cuando yo que soy un israelita de la más alta clase me he convertido y he sido llamado por Dios.

¡Yo soy la prueba!

viernes, 19 de febrero de 2021

¿Quién es el Pueblo de Dios?

No se dieron cuenta quien es el Pueblo de Dios

No se dieron cuenta 
quien es el Pueblo de Dios


Romanos 10:18-21 (Biblia Expandida de Fe)
18 Pero yo pregunto: ¿Será entonces que no han tenido la oportunidad de oír el mensaje? ¡Por supuesto que sí! La Escritura dice: El sonido de la voz de los mensajeros se ha difundido en todo el mundo y hasta el último rincón de los confines de la tierra han llegado sus palabras.
19 Y añado: ¿Acaso Israel no sabía ni se dio cuenta de ese mensaje? Para empezar, cito a Moisés que fue el primero que dijo: Yo provocaré sus celos con un pueblo que realmente no es un pueblo; con un pueblo vano, ignorante y sin entendimiento encenderé su ira.
20 Y luego Isaías se atrevió a decir aún más claramente: Hombres que no me buscaban me descubrieron y me encontraron; me manifesté, me revelé y me di a conocer a hombres que no preguntaban por mí.
21 Pero en cambio, de Israel dice: Todo el día he extendido mis manos tendidas a un pueblo incrédulo, desobediente, terco y rebelde.

Es sorprendente que el pueblo de Israel no se haya dado cuenta de que los gentiles, es decir, todos los no judíos estaban también incluidos en el plan de Dios para la humanidad.

En las Escrituras Dios ya les había hablado desde el tiempo de Moisés que la salvación no era exclusiva de ellos:

Deuteronomio 32:21  
21 Ellos me movieron a celos con lo que no es Dios; me provocaron a ira con sus ídolos; Yo también los moveré a celos con un pueblo que no es pueblo, los provocaré a ira con una nación insensata.

Como dice Pablo, Isaías lo dijo de manera más clara:

Isaías 65:1-2  
1 Fui buscado por los que no preguntaban por mí; fui hallado por los que no me buscaban. Dije a gente que no invocaba mi nombre: Heme aquí, heme aquí. 
2 Extendí mis manos todo el día a pueblo rebelde, el cual anda por camino no bueno, en pos de sus pensamientos.

El orgullo nacional les impidió ver que Dios no era exclusivo de ellos, sino que Dios es ahora nuestro Dios y nosotros somos Su pueblo.

Como Pedro dijo más adelante:

1 Pedro 2:9-10
9  Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; 
10  vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.

No se dieron cuenta que la iglesia, la cual es formada por judíos y gentiles, es el pueblo de Dios.

Nosotros somos el pueblo de Dios.


Escrito por Ricardo Botto

jueves, 18 de febrero de 2021

Como Nace la Fe para Salvación

 Como Nace la Fe para Salvación



Así que fe viene de lo que se escucha, y lo que se escucha viene a través de la Palabra de Dios (que es el mensaje de Cristo).
- Romanos 10:17 (Biblia Expandida)

La Biblia al Día lo coloca de una manera muy interesante: "Mas la fe nace cuando se presta atención a las Buenas Noticias acerca de Jesucristo."

La palabra fe en este versículo es el término griego pistis. Su significado primario es una firme persuasión, una convicción basada en lo oído. En el Nuevo Testamento se usa siempre para la fe en Dios o en Cristo, o en las cosas espirituales (Vine).

La fe nace o tiene su origen en algo que escuchamos.

Me acuerdo cuando empecé a trabajar en la AFP Integra, me presenté a una entrevista de trabajo y me contrataron. Me dijeron que me iban a dar una cantidad de dinero de sueldo en quincena y a fin de mes. Además me dieron una tarjeta de débito para retirar en esas fechas mi sueldo.

Yo iba a trabajar confiado sabiendo que en quincena y fin de mes iba a recibir mi sueldo, no tenía ninguna duda de ello. Había creído en mis empleadores y estaba totalmente convencido que iban a cumplir su palabra.

Así es como nace la fe; tú oyes la Palabra de Dios y te dejas convencer por ella.

Aquí el término griego para palabra es rhema.

Vine lo define de esta manera: "El significado de rhema, en su distinción de logos, queda ejemplificado en la instrucción a tomar «la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios» (Efesios 6:17); aquí la referencia no es a la Biblia entera como tal, sino al pasaje individual de las Escrituras que el Espíritu trae a nuestra memoria para su utilización en tiempo de necesidad, siendo el prerrequisito de ello la lectura habitual y memorización de las Escrituras." 

La palabra rhema nos habla de algo específico, no algo general sino algo puntual.

Cuando estaba en el colegio llevaba una serie de cursos; historia, geografía, matemáticas, religión, arte, educación física, entre otros. Cuando tenía examen de matemáticas no me ponía a estudiar historia sino a la hora del examen iba a desaprobar. Tenía que estudiar matemáticas.

En el contexto de Romanos 10 se está hablando acerca de la salvación por medio de Jesucristo. Entonces para recibir vida eterna debemos escuchar y creer el Evangelio de Jesucristo.

En las diversas versiones de la Biblia se intercambian palabra de Dios y palabra de Cristo. Y esto ocurre según el manuscrito que hayan utilizado para la traducción. Por ejemplo, las Biblias que utilizan el Textus Receptus (como la Reina Valera 1960) traducen Dios (Theos) y las que utilizan Westtcott – Hort (como la Biblia de las Américas) traducen Cristo (Christos).

Veamos algunas versiones para comprobar esto:

Así que la fe viene de la predicación escuchada, y esta predicación se hace en virtud de la palabra de Cristo (Serafin de Ausejo).

Mas la fe nace cuando se presta atención a las Buenas Noticias acerca de Jesucristo (Biblia al Día).

¿Lo ves? La fe sigue al mensaje, y el mensaje es el anuncio del Mesías (Nueva Biblia Española).

Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios (Reina Valera 1960).

Entonces, podemos concluir que la fe para salvación nace cuando escuchamos la predicación de la Palabra de Dios que trata específicamente acerca de Jesucristo.


Escrito por Ricardo Botto

miércoles, 17 de febrero de 2021

El Secreto Para Tener Pies Hermosos

El Secreto Para Tener Pies Hermosos



En estos tiempos que la gente está preocupada tanto por su apariencia la Biblia nos da el secreto para tener unos pies hermosos.

En la Carta a Romanos Pablo escribió:

Romanos 10:14-15 (Biblia Expandida)
14 Pero aquí surge una serie de preguntas:¿cómo van a invocar a aquel en quien no creen ni tienen fe? ¿Y cómo van a creer y tener fe en alguien de quien no han oído (su mensaje)? ¿Y cómo van a oír su mensaje si no ha sido proclamado por alguien que se los predique?
15 ¿Y cómo predicarán el mensaje si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian el Evangelio de la paz, de los que traen las buenas noticias!

En los versículos anteriores hemos visto que Dios ha provisto la salvación por medio de la obra de Jesucristo para todo aquel que crea en Él y lo confiese como Señor. 

En el versículo 13 dice: "Porque: Todo aquel que invoque el nombre del señor será salvo."

Pero esto nos deja con algunas interrogantes:

¿Cómo van a invocar a aquel en quien no creen ni tienen fe? 

¿Cómo van a creer y tener fe en alguien de quien no han oído (su mensaje)? 

¿Cómo van a oír su mensaje si no ha sido proclamado por alguien que se los predique?

¿Cómo predicarán el mensaje si no fueren enviados?

La primera pregunta es muy lógica, no podemos invocar a alguien en quien no hemos creído; la segunda también no podemos creer en alguien de quien no hemos oído y ni siquiera conocemos su mensaje. La tercera pregunta tiene la clave, no pueden conocer un mensaje si es que alguien no se los ha contado. Y la cuarta nos dice que para predicar debemos ser enviados.

Empecemos por la solución. En Juan 20:21 dice: "Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así también yo os envío." 

Jesús mismo es el que nos envía. A través de estas palabras dichas a los discípulos nos está hablando a todos los creyentes. 

En la gran comisión vemos esto:

Mateo 28:18-20
18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.

Marcos 16:15-16
15 Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.
16 El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.

Jesús nos comisionó para llevar este Evangelio, las buenas noticias de salvación a todos los hombres. Él mismo es quien nos ha enviado.

La tercera pregunta se responde así, somos nosotros los que debemos predicarles el mensaje; ya se nos encomendó, ahora nos toca a nosotros hacer algo. 

En 1 Corintios 9:16 Pablo nos habla de la carga del Evangelio: "Pues si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no anunciare el evangelio!" 

Él tenía la dirección clara en su vida, debía llevar este mensaje a todos los hombres.

Pero cual era este mensaje:

1 Corintios 2:1-2
1 Así que, hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría.
2 Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado.

El mensaje de Pablo era Jesucristo y su obra en la cruz. Jesús cancelando el castigo por nuestro pecado al morir por nosotros.

Ese también es nuestro mensaje: Jesucristo.

En 2 Corintios podemos ver más claramente este encargo que Dios nos dio:
 
2 Corintios 5:18-20
18 Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación;
19 que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.
20 Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.

Dios mismo nos hizo embajadores en nombre de Cristo, tenemos un mensaje que llevar al mundo: "Dios ya hizo su parte al enviar a Jesucristo a morir por nosotros, el precio ya se pagó, ahora nos toca a nosotros reconciliarnos con Dios."

Así es, la obra ya está completa, Jesús ya nos salvó, ahora nos toca recibir esa salvación.

Eso nos lleva a la primera pregunta, para que la gente crea tiene que oír el mensaje de la salvación. y esa es nuestra parte.

El mensaje del Evangelio es un mensaje de gran alegría, el uso que se le dio a esa palabra en la antigüedad nos los dice:

Esta palabra es de origen persa y aparece desde Homero con el significado de recompensa dada al mensajero que trae la buena noticia de una victoria militar o simplemente una buena noticia de carácter político o personal, que produce felicidad y alegría en los destinatarios.

En textos contemporáneos a los evangelios y en contexto religioso se indica también con esta palabra la aparición de un "hombre divino", cuya venida es acogida con alegría.

La predicación del Evangelio es lo que trae al hombre, cuando predicamos estamos trayendo gran alegría a todos los hombres; les estamos dando la oportunidad de recibir la vida eterna.

Así que hermosea tus pies saliendo y llevando este Evangelio de Jesucristo a todos los hombres.


Escrito por Ricardo Botto