jueves, 31 de octubre de 2019

Jesucristo - Segunda Parte

Profecías Acerca de Jesús
En el Antiguo Testamento

En el Libro de los Hechos vemos que los Apóstoles apelaron a dos hechos fundamentales para demostrar que Jesús era el Mesías, la resurrección de Jesús y las profecías del Antiguo Testamento.

Es interesante ver que desde el mismo principio de la Biblia se encuentran referencia acerca del Salvador que vendría al mundo.

Hay más de 300 profecías en el Antiguo Testamento acerca de Jesús, y la exactitud de algunas es realmente asombrosa, veamos algunas de ella para demostrar que Jesús es el Mesías o Salvador del mundo.

La primera de todas se encuentra en Génesis 3:14-15: “Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.”

Aquí vemos varias cosas, en primer lugar la enemistad que siempre ha existido entre Satanás y los hombres. Nos habla de la simiente de la mujer, es decir de Jesús, quien no nacería de forma natural, sino por medio de una virgen, y finalmente la victoria que tendría la simiente de la mujer sobre la simiente de la serpiente. La victoria de Jesús sobre Satanás a través de su muerte en la cruz (este te herirá en la cabeza y tu le herirás en el calcañar).

Otra profecía impactante se encuentra en Isaías 7:14, donde habla acerca del nacimiento virginal de Jesús: “Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel.”

Esta profecía tiene su cumplimiento en Mateo 1:18-25: “El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros. Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer. Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito; y le puso por nombre JESÚS.”

Maria se encontraba encinta y José, decidió separarse de ella porque pensó que le había sido infiel. Pero un ángel se le apareció y le dijo que había concebido del Espíritu Santo y que el niño que iba a nacer era el Mesías.

Mateo interpreta que este hecho fue el cumplimiento de la profecía de Isaías.

Otra promesa interesante en cuanto al nacimiento de Jesús es que Miqueas predijo el lugar de su nacimiento: “Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad” (Miqueas 5:2).

El cumplimiento de esto se ve en Lucas 2:1-7: “Aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto César, que todo el mundo fuese empadronado. Este primer censo se hizo siendo Cirenio gobernador de Siria. E iban todos para ser empadronados, cada uno a su ciudad. Y José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David; para ser empadronado con María su mujer, desposada con él, la cual estaba encinta. Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento. Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón.”

Es interesante ver que José y Maria vivían en Nazaret, que quedaba al norte de Israel, pero tuvo que haber un censo para que ellos viajasen a Belén, que era el lugar dispuesto por las Escrituras para que nazca el Mesías.

Otra cosa acerca de esta profecía es que la gente de Israel conocía el lugar donde iba a nacer el Mesías. En Mateo 2:1-6 dice: Una serie de profecías nos muestran el linaje de donde vendría el Mesías:

a. Jesús como simiente de Abraham (Génesis 22:18), su cumplimiento lo vemos en Mateo 1:1 y Gálatas 3:16.
b. Hijo de Isaac (Génesis 21:12) su cumplimiento lo vemos en Lucas 3:23-24.
c. Hijo de Jacob (Números 24:17), su cumplimiento lo vemos en Lucas 3:23-24.
d. Hijo de Judá (Génesis 49:10) su cumplimiento está en Lucas 3:23, 33.
e. Descendiente de Isaí (Isaías 11:1), su cumplimiento está en Lucas 3:23, 32.
f. Hijo de David (Jeremías 23:5), su cumplimiento está en Lucas 3:23, 31; además podemos ver varias veces en los evangelios que la gente llamaba a Jesús: hijo de David.

Aquí vemos una línea recta desde Abraham viendo de que familia y linaje provendría Jesús.

Como estas hay muchas profecías que trata de su vida, ministerio, muerte y resurrección, lo cual nos da plena convicción de que Jesús es el Hijo de Dios.

miércoles, 30 de octubre de 2019

Jesucristo - Primera Parte


Introducción

En este capítulo examinaremos la historia de Jesucristo, quien es, para que vino, que hizo y que está haciendo ahora.

Empecemos por el capítulo 1 del Evangelio de Juan: “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. . . Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. . . A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer” (versos 1-3, 14 y 18)

Aquí Juan nos está hablando acerca de Jesús. Jesús es el Verbo o Palabra (en el griego se usa la palabra logos).

Veamos Juan 1:1 en otras versiones:

Biblia en Lenguaje Sencillo
Antes de que todo comenzara ya existía aquel que es la Palabra.
La Palabra estaba con Dios, y era Dios.

Castillian
En el principio de todas las cosas era la Palabra, y la Palabra estaba con Dios y la Palabra era Dios.

Biblia de Jerusalén
En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios.

Nueva Biblia de los Hispanos
En el principio ya existía el Verbo (la Palabra), y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios.

Palabra de Dios Para Todos
Antes del comienzo del mundo ya existía la Palabra, la Palabra estaba con Dios y era Dios.

Reina Valera 2000
En el principio [ya] era la Palabra, y [aquel que es] la Palabra era con el Dios, y la Palabra era Dios.

De estas versiones, y de la traducción literal del término griego logos podemos concluir que una mejor traducción es palabra.

Vemos que esta palabra existió desde el principio.

Cuando estudiamos de la trinidad vemos que las tres personas de la Deidad estuvieron juntas desde el principio. El Hijo no empieza su existencia al entrar al mundo, solo toma la forma humana.

En Hebreos 10:5-7 dice: “Por lo cual, entrando en el mundo dice: Sacrificio y ofrenda no quisiste; mas me preparaste cuerpo. Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron. Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, como en el rollo del libro está escrito de mí.”

Jesús vino a este mundo para hacer la voluntad de Dios.

¿Cuál es esa voluntad?

En Juan 3:16 dice: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”

Jesús vino para traer la vida eterna a los hombres, la cual habían perdido en la caída.

Jesucristo es ese verbo que existió desde el principio, que como dice el verso 14 de Juan 1 se hizo carne, es decir tomó un cuerpo para vivir entre nosotros.

Jesús es Dios hecho carne y viviendo entre nosotros con un plan y un propósito definido.

martes, 29 de octubre de 2019

El Origen de la Biblia


El Origen de la Biblia

Todos los escritos originales de la Biblia se han perdido así que, ¿cómo podemos saber que lo que tenemos es fidedigno?

Sabemos que la fe no se basa en incertidumbres.

Debemos leer y estudiar la Palabra con la confianza que es la misma Palabra de Dios.

La Biblia tiene un tema principal que es la redención del hombre.

Es un libro, con un autor y 66 divisiones.

Fue escrita por cerca de 40 escritores en un período de 1600 años.

Para entender la Biblia debemos conocer y entender a su autor.

Biblia: viene de la palabra griega “Biblos” que significa “los libros”.

En Daniel 9:2 dice: “En el año primero de su reinado, yo Daniel miré atentamente en los libros el número de los años de que habló Jehová al profeta Jeremías, que habían de cumplirse las desolaciones de Jerusalén en setenta años”. Lo que Daniel había leído eran los escritos de Jeremías acerca de la cautividad Babilónica de Israel (Jeremías 25:11-12; 29:10); pues los 70 años ya casi habían concluido.

El autor de Hebreos habla del Antiguo Testamento en el verso 10:7 cuando dice: “...como en el rollo del libro está escrito de mi.” El verso que cita es el Salmo 40:7, que muestra a Jesús como la figura central del Libro.


En Oseas 8:12 donde dice “Les escribí...” el profeta se está refiriendo a sus propios escritos, los cuales fueron hechos por inspiración.

En Efesios 6:17 dice que “la espada del Espíritu es la Palabra de Dios” y en Juan 1:1,14 vemos que Jesús es la Palabra viva de Dios.

“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.”

No están en desacuerdo porque el autor de la Biblia es el Espíritu Santo.

Si tuviéramos los originales la gente los veneraría y adoraría. Recordemos lo que hizo el Rey Ezequías con la serpiente de bronce que Moisés hizo en el desierto (2 Reyes 18:14); tuvo que destruirla porque la gente la adoraba porque estaba asociada a Moisés.

¿Cómo es que los escritores de la Biblia obtuvieron su mensaje?

Pablo dijo que fue por revelación e inspiración. En Gálatas 1:11-12 dijo: “Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mi, no es según hombre; pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo”; y en Efesios 3:3 dijo: “...que por revelación me fue declarado el misterio, como antes lo he escrito brevemente.”

En Segunda de Pedro 1:20-22 el Apóstol nos dice: “Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en un lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios, hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.”

De aquí vemos que la Palabra de Dios vino por inspiración y revelación.

REVELACIÓN: El acto de revelar, ó algo que revelado, ó descubrir, ó develar.

INSPIRACIÓN: Soplar (inspiración Divina significa soplado por Dios, el Espíritu Santo)

En Segunda de Timoteo 3:16 dice: Toda la escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia.”

La revelación es el mensaje (descubriendo al salvador)

La inspiración es como vino, el método utilizado.

La conciencia profética significa la convicción calificada por parte del profeta o apóstol del llamado divino para proclamar la Palabra de Dios.

Los profetas del Antiguo Testamento también operaron en la palabra de conocimiento y la palabra de sabiduría.

Mas de 2500 veces dice: “Así dijo Jehová”, ó “la Palabra de Jehová vino”, o “Dios me habló y me dijo”.

En Números 12:6-8 dice: “Y él les dijo: Oíd ahora mis palabras. Cuando haya entre vosotros profeta de Jehová, le apareceré en visión, en sueños hablaré con él. No así con mi siervo Moisés, que es fiel en toda mi casa. Cara a cara hablaré con él; y verá la apariencia de Jehová....”

Pruebas del Origen Divino de la Palabra de Dios

En la historia encontramos eslabones desde los días y escritos de Moisés hasta el tiempo presente.

1. La Biblia es su propia prueba

La Biblia son sus propias credenciales. La Biblia nos habla con autoridad final

En Hebreos 6:13-18 dice: “Porque cuando Dios hizo la promesa a Abraham, no pudiendo jurar por otro mayor, juró por sí mismo, diciendo: De cierto te bendeciré con abundancia y te multiplicaré grandemente. Y habiendo esperado con paciencia alcanzó la promesa.

Porque los hombres ciertamente juran por uno mayor que ellos, y para ellos el fin de toda controversia es el juramento para confirmación. Por lo cual, queriendo Dios mostrar mas abundantemente a los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, interpuso juramento; para que por dos cosas inmutables en las cuales es imposible que Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo los que hemos acudido para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros.”

Esto es lo que significa la autoridad final, Dios juró por si mismo.

No hay autoridad mas alta que Dios, y como Él escribió el libro es suficiente para decir que lo que Él dijo es verdad.

El no puede mentirnos; ni tampoco necesita mayor autoridad para establecer Su verdad.

En Mateo 7:28-29 después del Sermón del Monte dice: “Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.” En Marcos 1:22 dice prácticamente lo mismo. En Juan 7:46 los alguaciles que fueron a arrestarlo dijeron: “¡Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre!”

Jesús hablaba con la autoridad final.

2. El Testimonio del Espíritu Santo

El Espíritu Santo nos testifica que es la Palabra de Dios; porque es el mismo Espíritu Santo el autor de la Biblia. Además nos confirma que es la Palabra de Dios respaldándola con poder.

3. La Durabilidad de la Biblia

Ha sobrevivido a través de las edades. Ningún libro ha enfrentado tanta oposición como la Biblia; sin embargo se ha multiplicado en números y lenguajes. Jesús dijo: “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” (Mateo24:35, Marcos13:31, Lucas 21:33).

Voltaire, el famoso incrédulo francés, quien murió en 1778, dijo que cien años después de su muerte el cristianismo y la Biblia serian barridos de la existencia y pasado a la historia. Pero, ¿qué pasó? Voltaire pasó a la historia, pero la Biblia sigue extendiéndose mas y mas llevando bendición por donde quiera que vaya.

Acerca de la burla de Voltaire acerca de la extinción del cristianismo y la Biblia, solo cincuenta años después de su muerte la Sociedad Bíblica de Génova compró la casa y la imprenta de Voltaire para producir grandes cantidades de Bíblias.

En el año 303 D.C. el emperador romano Diocleciano proclamó un edicto para destruir a los cristianos y su sagrado libro; lo irónico del caso es que solo 25 años después el Emperador Constantino comisionó a Eusebio de Cesárea ha preparar 50 copias de la Biblia con el mejor material posible a expensas del gobierno.

El yunque (la palabra) desgasta los martillos (las críticas).

La durabilidad y supervivencia de la Biblia es prueba de su origen divino.

4. Su Poder Para Transformar

El poder transformador de las Escrituras ha sido siempre una de las evidencias mas fuertes de su origen divino.

Su mensaje es universal, siempre esta de moda, es el testimonio de Jesucristo.

Los temas de la Biblia son: Dios y su amor por el hombre expresado en Su gracia; el hombre y su pecado; y, la redención por la sangre de Jesús.

Todos estábamos en la casa de empeños del diablo. Dios era nuestro dueño pero no nos poseía. El nos volvió a comprar pagando todo el precio cuando nos redimió.

La Biblia nos habla del origen, significado y destino de la vida. Tiene una vista inigualada de la vida; en la cual no se permite el pecado, tiene excelencia moral.

La soga inglesa siempre tuvo un hilo escarlata tejido en toda su extensión; del mismo modo hay una cuerda roja de Génesis a Apocalipsis que nos habla de la redención.


5. Su Influencia Cambió la Historia

Su efecto a cambiado millones de vidas. Los libros escritos por hombres no pueden hacer esto a menos que citen la Biblia.

Durante los años oscuros de la edad media cambió la historia de Europa mediante la Reforma.

En 1508 mientras Lutero estudiaba la epístola de Romanos descubrió la verdad que cambió al mundo: “El justo por la fe vivirá.”

Del siglo quinto al dieciseisavo solo habían Biblias en Latín. Las iglesias enseñaban que la salvación era por medio de obras y penitencias. La autoridad de la Biblia contra la autoridad de la religión de ese día. La gente pagaba por la Biblia con su propia sangre. La verdad que descubrió Lutero cambió la autoridad de la iglesia establecida y se la devolvió a la Biblia.

A lo largo de la historia la influencia de la Biblia a cambiado la historia en los lugares donde ha llegado y sigue haciéndolo hoy.

6. Su Continuidad Demuestra Su Origen Divino

La Biblia fue escrita en un periodo de tiempo que abarca 1600 años; durante el transcurso de 60 generaciones; por cerca de 40 autores.

Tiene una multiplicidad de autores que abarcaron las diversas áreas de la vida. Hubieron reyes, campesinos, filósofos, pescadores, estadistas, catedráticos, entre otros.

Moisés era un líder político, educado en la mejores universidades de Egipto; Pedro, un pescador; Amos era un boyero; Josué era un general; Nehemías era un copero; Lucas un doctor; Salomón un rey; Mateo un recolector de impuestos; Pablo un rabino.

Fue escrita en diversos lugares: Moisés en el desierto; Jeremías en un calabozo; Daniel en el campo y en un palacio; Pablo dentro de una prisión; Lucas mientras viajaba; Juan en el exilio, en la isla de Patmos; otros en medio de campañas militares.

Fue escrita en diversos tiempos: David escribió en tiempos de guerra, mientras que Salomón en tiempos de paz.

Fue escrita en diversos estados de animo: algunos llenos de gozo y otros en medio del dolor y la desesperación.

Fue escrita en tres continentes: Asia, África y Europa.

Fue escrita en tres idiomas: Hebreo, Arameo y griego.

Los autores bíblicos hablaron de cientos de temas con armonía y continuidad, desde Génesis hasta Apocalipsis.

Un tema principal: La redención del hombre.

La continuidad de las Biblia es prueba de su origen divino.

7. Sus Enseñanzas Prueban su Origen Divino

Las enseñanzas que hay en la Biblia no tienen similar en la historia humana, como vimos antes el mensaje que hay en ellas tienen el poder para cambiar la vida de las personas.

El cumplimiento de sus profecías a lo largo de la historia nos demuestran que este libro no pudo haber sido escrito por un hombre. Por ejemplo las mas de 300 profecías acerca del nacimiento, vida, ministerio, muerte y resurrección de Jesús, no pudieron ser hechas por suposición humana.

La exactitud del relato histórico de la Biblia, el cual ha sido confirmado con los descubrimientos arqueológicos, nos muestra claramente como ha sido el mundo desde sus inicios.

Los personajes que hay en ella son descritos con sus triunfos y derrotas, sin dar lugar a la exageración o el mito. Si vemos la historia secular vemos que tratan a sus grandes personajes casi como si fueran santos, pero la Biblia nos dice las cosas como son, sin importar que tan bajo haya caído la persona.

La forma en que está escrita nos demuestra que la Biblia tiene un origen divino.

Charles Finney, el gran evangelista y propagador de avivamientos del siglo 19 dijo:

“La Biblia puede ser invento de:
(a) Buenos hombres o ángeles, pero ellos no podrían decir: ‘Así dice Jehová’ pues estarían mintiendo al atribuirle su obra.
(b) Demonios u hombres malos, pero ellos no dirían que algo que los condena es bueno.
(c) O, de Dios

lunes, 28 de octubre de 2019

Nuestra Identificación Con Cristo

Nuestra Identificación Con Cristo
Por Ricardo Botto


Romanos 5:12
12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.

1 Corintios 15:21-22, 45
21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.
22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.
45 Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante.

Desde el punto de vista de Dios, en el momento que Cristo fue crucificado, muerto, sepultado, resucitado y sentado en los lugares celestiales, nosotros también lo estamos con Él.

El primer Adán fue la cabeza de una raza de hombres que murió espiritualmente; el postrer Adán es la cabeza de una nueva raza de hombres que tiene la vida de Dios en ellos y están vivos espiritualmente.

Todos los hombres están incluidos en Adán y en todas las cosas en las que participó, pues estamos identificados con él.

La identificación con Cristo es nuestra completa unión con todo lo que él hizo, junto con él pasamos lo que él pasó.

La identificación es el aspecto legal de nuestra redención, lo que el Espíritu hace en nosotros es el aspecto vital.

La identificación es todo lo que Cristo obtuvo para la nueva criatura.

Doce Aspectos de la Identificación

1. Estamos Crucificados con Cristo

Gálatas 2:20
20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

Ya hemos sido juzgados, condenados, flagelados, desvestidos y crucificados con él.

Romanos 6:6
6 Sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado.

Participamos en sus sufrimientos y estamos incluidos en su muerte para ya no estar bajo el primer Adán sino bajo Cristo.

Romanos 6:14
14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.

Hemos muerto y ya no estamos bajo ley sino bajo la gracia.

2. Él Fue Hecho Pecado Por Nosotros

2 Corintios 5:21
21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.

Al hacerse pecado Jesús se estaba identificando con los hombres tomando la naturaleza caída para poder tomar nuestro lugar y redimirnos.

En esa cruz, Jesús tomo nuestro pecado con el fin que fuésemos 

3. Él Fue Hecho Enfermedad Para Sanarnos

Isaías 53:3-5
3 Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.
4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.
5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.

En esa cruz Jesús no solo llevó nuestros pecados sino también nuestra enfermedad. Él se hizo enfermedad por nosotros para que no tengamos que sufrir en enfermedad.

Mateo 8:17
17 Para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias.

No tienes que estar llevando lo que Jesús llevó. Si Jesús llevó tu enfermedad, ¿qué haces llevándola en tu cuerpo?

Una vez le di un ejemplo a mi hijo Ricardo mientras íbamos a la escuela de Sanidad Divina. Yo le había estado enseñando que Jesús había llevado nuestras enfermedades, así que le dije: “Supongamos que mi Biblia es la enfermedad, yo soy el enfermo y tu eres Jesús, ahora tu toma la Biblia y llévala”; él me quitó la Biblia y se la llevó, así que le dije: “Eso fue lo que hizo Jesús el tomó nuestras enfermedades y se las llevó, ahora él es quien tiene nuestras enfermedades.”

A veces pensamos que tenemos que ir por la vida llevando nuestras enfermedades; pero, la enfermedad ya no es tuya, Jesús la tomó y se la llevo, así que no vayas detrás de él, queriendo quitarle tu enfermedad para volverla a sufrir.

4. Él Se Hizo Pobre Para Que No Vivamos En Pobreza

2 Corintios 8:9
9 Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos.

Fue en la cruz donde Jesús se hizo pobre por nosotros, cuando fue crucificado no tenía ni siquiera  tenía el taparrabo que le pusieron para tapar sus partes íntimas que vemos en las películas, estaba totalmente desnudo.

Durante su ministerio nunca experimentó hambre ni necesidad, todo lo que necesitaba lo tuvo. Pudo alimentar durante todo su ministerio a sus discípulos, dio de comer a los pobres, no le falto donde dormir a él ni a los suyos. Sin embargo, en esa cruz lo dejó todo, murió sin nada.

Es a través de está pobreza que nosotros somos enriquecidos.

Hebreos 8:6
6 Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas.

Es a través de nuestra identificación con Cristo que recibimos las bendiciones del nuevo pacto. Todo lo que somos y lo que tenemos es la consecuencia de la obra de Jesús por nosotros.


5. Hemos Muerto con Él

Isaías 53:9-12
9 Y se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos fue en su muerte; aunque nunca hizo maldad, ni hubo engaño en su boca.
10 Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad de Jehová será en su mano prosperada.
11 Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos.
12 Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y con los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó su vida hasta la muerte, y fue contado con los pecadores, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado por los transgresores.

En Hebreo dice “en sus muertes”. Para poder identificarse con nosotros Jesús tuvo que morir tanto física como espiritualmente.

2 Timoteo 2:11-13
11 Palabra fiel es esta: Si somos muertos con él, también viviremos con él;

12 Si sufrimos, también reinaremos con él; Si le negáremos, él también nos negará.

13 Si fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo.

Para vivir con él también debemos morir con él.

Romanos 6:7
7 Porque el que ha muerto, ha sido justificado del pecado.

Al morir con él es que somos justificados del pecado.

1 Pedro 2:24
24 quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados.

Jesús se hizo pecado por nosotros para que nosotros podamos vivir.

6. Fuimos Sepultados con Él

Colosenses 2:12-13
12 Sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos.
13 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados.

Romanos 6:4
4 Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.

El hecho de haber sido sepultados con Cristo significa que nuestro viejo hombre ya fue sepultado y nosotros somos ahora nuevas criaturas.

7. Él Sufrió Todo por Nosotros

Salmo 88:3, 7
3 Porque mi alma está hastiada de males, mi vida cercana al Seol.
7 Sobre mí reposa tu ira, Y me has afligido con todas tus ondas. Selah

Este Salmo nos habla de los sufrimientos que iba a sufrir Cristo por nosotros.

1 Pedro 3;18
18 Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu.

Jesús sufrió en la carne para llevarnos a Dios.

Apocalipsis 1:17-18
17 Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último;
18 y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.

Jesús sufrió los tormentos del infierno, la ira y separación de Dios y debido a eso paralizó a Satanás y le quitó las llaves de la muerte y el hades.

8. Vivificados con Él


Colosenses 2:13
13 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados.

Efesios 2:5
5 Aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos).

Nosotros que estábamos muertos hemos recibido la vida eterna juntamente con Jesucristo.

Romanos 6:5
5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección.

Hechos 13:33
33 La cual Dios ha cumplido a los hijos de ellos, a nosotros, resucitando a Jesús; como está escrito también en el salmo segundo: Mi hijo eres tú, yo te he engendrado hoy.

1 Pedro 3:18
18 Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu.

A través de la resurrección de Jesús es que nosotros somos llevados a Dios,

9. Fuimos Hechos Justos Con Él

Romanos 3:21-26
21 Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas;
22 la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia,
23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,
24 siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús,
25 a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados,
26 con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.

Somos justos por la obra de Dios en Cristo, y por eso es que tenemos la naturaleza de Dios en nuestras vidas.

Romanos 4:24-25
24 Sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro,
25 el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.

Jesús fue hecho justo cuando resucito a fin de poder justificarnos.

10. Conquistó a Satanás Por Nosotros

Apocalipsis 1:17-18
17 Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último;
18 y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.

En su resurrección Jesús conquistó el reino de Satanás y tomó dominio sobre él.

Mateo 28:18
18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.

Jesús recibió la autoridad que el diablo tenía sobre la tierra.

Colosenses 2:15
15 Y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.

En la cruz Jesús despojó al diablo y sus huestes de su poder y autoridad.

11. Somos Resucitados con Él

Romanos 6:5
5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección.

El ser plantados juntamente con Jesús en su resurrección, significa que Dios acepto el sacrificio de Jesús en la cruz y que podemos disfrutar de la vida eterna.

12. Se Sentó Y Nos Sentó Juntamente Con Él

Efesios 2:4-7
4 Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó,
5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),
6 y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús,

7 para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.

Hebreos 1:3
3 El cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas.

Jesús no solo esta sentado en el lugar más alto de autoridad, sino que Dios nos sentó juntamente con Él. Ahora estamos sentados junto a Él por su obra en la cruz.

Colosenses 3:1
1 Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.

Jesús habiendo acabado su obra en la tierra se sentó a la diestra de Dios; esto significa que ya no le toca a él hacer la obra aquí en la tierra sino a nosotros.

Juan 19:30
30 Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.

Su obra ya terminó, el pagó el precio de nuestra redención por tanto hagamos nosotros las obras de Dios en la tierra.