Cómo Entrenar al
Espíritu Humano
Lámpara de Jehová
es espíritu del hombre . . .
-
Proverbios 20:27
El Señor nos ilumina
y guía a través de nuestros espíritus. Por eso necesitamos volvernos más conscientes de nuestro espíritu. Debemos estar más conscientes de la realidad
de que somos seres espirituales y no sólo seres mentales o físicos. Necesitamos entrenar a nuestro espíritu de
manera que se convierta en una guía cada vez más segura.
Algo que nos
detiene a los creyentes es que somos más conscientes del mundo físico
(conscientes del cuerpo) y más consciente de la mente (conscientes del alma)
que del espíritu. Hemos desarrollado el
cuerpo y el alma, pero casi no hemos tocado el espíritu del hombre.
Tu espíritu puede
ser educado del mismo modo que tu mente.
Tu espíritu puede ser fortalecido y entrenado del modo que tu cuerpo.
He aquí cuatro
reglas que te ayudarán a entrenar y desarrollar tu espíritu:
1. Meditar en la Palabra.
2. Poner en práctica la Palabra.
3. Dar a la Palabra el primer lugar.
4. Obedecer a la voz de su espíritu
inmediatamente.
1. MEDITAR EN LA PALABRA DE DIOS.
JOSUE 1:8
8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la
ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas
conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu
camino y todo te saldrá bien.
Parafraseando esta
verdad en el lenguaje del Nuevo Testamento, podríamos decir: "Nunca se
apartará de tu boca la Palabra de Dios; particularmente el Nuevo Testamento, sino
que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo
lo que en él está escrito, porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te
saldrá bien".
Si alguna vez
desea lograr algo grande, desea lograr algo en la vida; tome tiempo para
meditar en la Palabra de Dios. Empiece
con 10 ó 15 minutos diariamente como mínimo - luego incremente el tiempo.
No se apartará de
tu boca la Palabra de Dios. Habla la
Palabra. Sino que meditarás en
ella. Piensa en la Palabra.
La palabra hebrea
traducida como meditarás incluye la idea de murmurar. Murmura la Palabra. Háblesela.
Una versión de
Josué 1:8 dice en la última frase:
". . . serás capaz de actuar sabiamente en los asuntos de la
vida". Uno no puede tener éxito si
no sabe actuar con sabiduría en los asuntos de la vida.
¿De qué manera se
puede saber cómo actuar con sabiduría en los asuntos de la vida?. Se puede saber por meditar en la Palabra de
Dios y caminar en la luz de esa Palabra.
2. PONER EN
PRACTICA LA PALABRA .
Poner en práctica
la palabra quiere decir ser un hacedor de la Palabra.
SANTIAGO 1:22
22 Pero sed hacedores de la palabra, y no tan
solamente oidores . . .
Empieza a ser un
hacedor de la Palabra haciendo lo que la Palabra te dice que hagas en todas las
circunstancias.
Algunos creen que
ser hacedores de la Palabra quiere decir guardar los Diez Mandamientos. Eso no es lo que Santiago 1:22 quiere
decir. Después de todo, bajo el Nuevo
Pacto tenemos sólo un mandamiento; el mandamiento del amor. Jesús dijo: "un mandamiento nuevo os
doy, que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos
a otros" (Juan 13:34).
Un hacedor de la
Palabra hará eso. Si uno ama a una
persona, no le robará. No dirá mentiras
de él. El Nuevo Testamento dice que el
amor es el cumplimiento de la ley. Si
uno camina en amor no quebrantará ninguna ley dada para refrenar el pecado.
Debemos hacer lo
que Dios dice en Su Palabra
3. DAR A LA
PALABRA EL PRIMER LUGAR.
El entrenamiento,
el desarrollo y la educación de nuestro espíritu se logra por dar a la Palabra
de Dios el primer lugar en nuestra vida.
PROVERBIOS 4:20-22
20 Hijo mío, está atento a mis palabras; inclina
tu oído a mis razones.
21 No se aparten de tus ojos; guárdalas en medio
de tu corazón;
22 Porque son vida a los que las hayan, y
medicina a todo su cuerpo.
Dios dice en este
pasaje: ". . . está atento a mis
palabras, [présteles atención, considérelas en primer lugar], inclina tu oído a
mis razones [escuche lo que tengo que decir];
No se aparten de tus ojos, [siempre mira a la Palabra de Dios];
guárdalas, [mis Palabras] en . . . tu corazón".
Hay gran ganancia
por hacer esto. ¿Por qué nos dice Dios
que pongamos su Palabra en primer lugar, que escuchemos lo que Él tiene que
decir, que nos mantengamos mirando su Palabra y guardemos su Palabra en nuestro
corazón?. Porque ". . . ellas [Sus
Palabras] son VIDA a los que la hayan, y MEDICINA a todo su cuerpo".
Debemos
entrenarnos en preguntarnos a nosotros mismos, con relación a cualquier
área: "¿Qué es lo que la Palabra de
Dios dice al respecto?". Debemos
preguntarnos, qué es lo que Dios dice respecto a cualquier cosa que acontezca
en nuestra vida - y luego poner a la Palabra en primer lugar.
A veces la familia
y los amigos intentarán presionarle para que hagas ciertas cosas; pero debes
pensar en lo que la Palabra de Dios dice.
Ponga la Palabra de Dios en primer lugar en toda área de la vida.
4. OBEDECER A LA VOZ DE TU ESPÍRITU
INMEDIATAMENTE.
El espíritu humano
tiene una voz que llamamos conciencia . A veces la llamamos intuición, una voz
interior o guía. El mundo la llama presentimiento. Pero, lo que es, es la voz de su espíritu
hablándole. El espíritu de todo hombre, salvo o no, tiene una voz.
El espíritu humano,
es el hombre espiritual, el hombre interno y oculto. Él está oculto a los sentidos físicos. No se le puede ver con los ojos físicos, ni
tocar con las manos físicas. Es el
hombre que se ha convertido en una nueva criatura en Cristo (2 Corintios
5:17). Cuando un hombre nace de nuevo,
su espíritu se convierte en un nuevo espíritu.
Dios profetizó por
medio de Ezequiel y de Jeremías que llegaría el tiempo en que sacaría del
hombre el corazón de piedra y le daría uno nuevo. Dijo que pondría Su propio Espíritu dentro de
nosotros. Bajo el Nuevo Pacto, este
nuevo nacimiento está disponible.
El nuevo nacimiento
es el renacimiento del espíritu humano.
Como dice en Segunda de Corintios 5:17, si alguno está en Cristo, nueva
criatura es; todo lo que era viejo en su espíritu, la vieja naturaleza, ha sido
quitado y todas las cosas han sido hechas nuevas.
"Lámpara de
Jehová es el espíritu del hombre . . ."
(Pr. 20:27). Su espíritu recién
nacido tiene la vida y la naturaleza de Dios.
El Espíritu Santo mora en su espíritu.
". . . mayor es el que está en vosotros, que el que está en el
mundo" (1 Juan 4:4). El Espíritu
Santo mora en tu espíritu. Dios tiene
que comunicarse con usted a través de su espíritu porque es allí donde Él se
encuentra. Tu espíritu recibe su
información a través de Él.
Aprende a obedecer
a la voz de su espíritu.
Por supuesto, no
lo logrará rápidamente si no estás acostumbrado a hacerlo. El espíritu puede ser edificado y fortalecido
del mismo modo que lo hacemos con el cuerpo y el alma. Del mismo modo que no empezaste el primer
grado de la escuela en una semana y te graduaste de último año en la siguiente,
tampoco tu espíritu será educado y entrenado de la noche a la mañana.
Pero si sigues
estos cuatro puntos y los pones en práctica, después de un tiempo podrás
conocer la voluntad de Dios el Padre, incluso en los más mínimos detalles de tu
vida. Recibirá dirección y tendrás
inmediatamente un sí o un no. Sabrás en tu
espíritu lo que debes hacer en los asuntos de la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario